Las protestas tras los resultados oficiales de las elecciones del 28 de julio en Venezuela dejaron 2400 detenidos, según Nicolás Maduro. Abogados y familiares aseguran que a los privados de libertad se les viola el derecho al debido proceso judicial.
Caracas. Días después de sus detenciones, consideradas arbitrarias por familiares y organizaciones no gubernamentales, algunos integrantes de la oposición de Venezuela como Freddy Superlano, Roland Carreño, Williams Dávila y Américo de Grazia continúan “desaparecidos” y sus defensores siguen sin saber de qué se les acusa, hechos que marcan la violación de sus debidos procesos judiciales.
“Sabemos que se lo llevaron detenido por los videos que circularon en las redes sociales, pero no supimos quién se lo llevó ni dónde está, qué tribunal lo está procesando o qué fiscal lo está atendiendo”, dijo sobre el caso de Superlano su defensor, el abogado Joel García.
Superlano fue detenido el 30 de julio pasado, en Caracas, cuando se trasladaba junto con su primo Renso Salinas y el dirigente de La Causa R, Rafael Enrique García. Un video del suceso muestra el momento en que una camioneta bloquea el vehículo de Superlano y apresa al antiguo diputado y sus acompañantes.
Entre el 29 y 30 de julio se registraron protestas en todo el país, en rechazo a los resultados oficiales de las elecciones del pasado 28 de julio, que dieron como ganador con más de 51 % de los votos a Nicolás Maduro. De acuerdo con el mandatario hay 2400 personas detenidas durante las manifestaciones.
“Lo único que sabemos de manera extraoficial, porque nos lo dijo un funcionario de bajo rango en el Sebin, es que él se encontraba en El Helicoide. Eso es lo único que sabemos, no sabemos más nada, no sabemos qué delito le imputaron”, insistió García.
“Cero defensa, cero comunicación”
García, quien también lidera el equipo de defensores de los dirigentes opositores Roland Carreño y Williams Dávila, dijo que tiene “cero comunicación” con estos, por cuanto considera que tienen “cero defensa”.
“De ellos no sabemos nada tampoco, extraoficialmente sabemos que están en el Sebin de El Helicoide, pero eso no ha sido verificado por la misma violación al debido proceso: cero defensa, cero comunicación”, dijo al respecto.
Un grupo que familiares y defensores creen eran policías vestidos de civil quienes detuvieron a Dávila el jueves, 8 de agosto, cuando salió de una vigilia en la plaza Los Palos Grandes, organizada para pedir la liberación de los presos políticos en Venezuela.
A Carreño, entretanto, lo arrestaron una semana antes, el 2 de agosto. Su caso es llamativo porque los venezolanos recuerdan que entre 2020 y 2023 estuvo tras las rejas acusado de varios delitos, entre ellos el de supuestamente promover la violencia.
“Secuestro” y violación al debido proceso
En este sentido, García señaló que “ni siquiera se puede hablar de proceso” judicial contra Superlano, Carreño o Dávila, puesto que no han tenido la posibilidad de defenderse de las acusaciones en su contra.
“Mientras no exista la posibilidad de defensa ¿Puedes hablar de proceso de Justicia? Eso es bien difícil”, apuntó García, al tiempo que calificó las detenciones de estos dirigentes de secuestros.
“Yo digo que esto es un secuestro con apariencia de proceso judicial. Un secuestro es cuando alguien tiene a un rehén hace lo que le da la gana con el rehén, pide a cambio algo, pero aquí ni siquiera nos han pedido nada a cambio, ellos están como rehenes porque proceso judicial no tienen, y si lo tienen es una apariencia porque lo primero que debe ocurrir es ´yo te acuso de esto, pero defiéndete´, y eso no existe en estos casos”.
El caso de Américo de Grazia
El pasado 7 agosto, el dirigente opositor Américo de Grazia dejó la clandestinidad en la que se encontraba tras amenazas que recibió luego de no reconocer los resultados de las elecciones presidenciales, para atender una emergencia médica y trasladarse a Caracas, donde pensaba que estaría más seguro.
Pero las autoridades lo detuvieron sin que hasta ahora se haya dado parte a los familiares, que califican el hecho como un “secuestro”.
“No tenemos ni idea de cómo se produjo la detención. Mi papá estaba resguardado desde el día después de las elecciones del 28 de julio debido a amenazas del Gobierno estatal y regional a su persona y familia. Él estuvo resguardado en el estado Bolívar que es de donde somos, estuvo cuatro días allá y decidió moverse a Caracas porque es una ciudad más grande y consideramos que iba a estar más seguro o menos expuesto”, dijo a Cronica Uno, María Andreina de Grazia, una de las hijas del político.
“Hasta el sol de hoy no sabemos qué delitos se le imputan, todo es hermetismo, no hay ninguna información legal del caso, no tenemos fe de vida de él”, agregó.
La familia cree que De Grazia está recluido en la sede del Sebin El Helicoide, pero no tienen confirmación oficial.
La hija del opositor también exigió que permitan a De Grazia la defensa privada y su familia poder constatar su estado de salud.
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