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A eso de las 10 de la noche del miércoles llegaron varios oficiales de alto nivel a la cárcel de El Chipote, en Managua, donde se encontraba un grueso número de presos políticos de Nicaragua. J. T estaba por irse a dormir. Pero, entraron a su celda y les dijeron a todos los que estaban allí: quítense esa ropa y pónganse la de civil, que vamos a una actividad especial.

La excarcelación de 222 presos políticos nicaragüenses tomó por sorpresa a muchos. En la mañana de este jueves la noticia salió disparada, mientras ya iban a bordo de un Boeing 767 de la aerolínea Omni en un vuelo chárter hacia Estados Unidos.

Entre los pasajeros se encontraban Dora María Téllez, el joven Lester Alemán, Cristiana Chamorro, Pedro Joaquín Chamorro, Juan Sebastián Chamorro así como parte del staff del diario La Prensa, entre ellos dos conductores y el gerente del medio Juan Lorenzo Hollman; el periodista deportivo Miguel Mendoza y el excandidato presidencial Félix Madariaga.

Otros menos conocidos como J.T ( siglas usadas para salvaguardar su identidad) también estaban entre los liberados.

No sabían de su excarcelación

J.T quien llegó en el grupo de liberados relata que una vez se cambiaron de ropa, los fueron agrupando en celdas donde cabían unas 20 personas y en medida que se llenaban empezaron a hacer conjeturas. Unos creían que los iban a a llevar hasta la frontera con Costa Rica y » nos iban a dejar allí, como indeseables». Y otros creían que los iban a trasladar a otra cárcel.

Pero no fue así. Los subieron a un autobús. A eso de las 12 de la noche fueron trasladados al aeropuerto de Managua. El avión que los transportaría estaba casi vacío. Solo estaban a bordo los Chamorro y algunos más. Pero, entre la medianoche y las 5:00 a.m. aproximadamente se fue llenando con los 222 pasajeros.

El avión aterrizó en el aeropuerto de Dulles, que sirve a la ciudad de Washington DC. Eran aproximadamente las 11:30 a.m., hora este.

En la zona de salida algunos familiares y grupos de activistas nicaragüenses esperaban por sus seres queridos. No estaban seguros de si estaban en el vuelo, aunque varios compartían una lista de presos políticos de Nicaragua y suponían que sí.

Mientras se alargaba la espera, cantaban «Nicaragua, Nicaragüita», una canción muy conocida en el país centroamericano.

Aproximadamente a las 2:00 p.m. un funcionario del equipo de Comunicaciones del Departamento de Estado se presentó ante la puerta 1 de la zona de salida de pasajeros para informar que los liberados no saldrían por esa puerta. De hecho, ya había salido un grupo de 15 personas hacia el hotel Westin, a 10 minutos del aeropuerto. Este hotel se convirtió en el punto de encuentro para los familiares, los liberados y la prensa.

En un salón del hotel habilitaron unos seis compartimentos, divididos con cortinas, donde cada liberado tenía un poco de privacidad antes de salir a ver a alguien conocido.

Quiénes recibieron a los presos políticos

No todos tenían familiares esperando, pero sí amigos.

De vez en cuando una funcionaria voceaba el nombre de alguno de los liberados para ver si estaba algún familiar.

En otros casos, activistas que han trabajado por la libertad de los presos políticos de Nicaragua los recibieron.

Los excarcelados que aceptaron declarar salían hacia fuera del hotel para hacer sus comentarios, mientras adentroseguían siendo atendidos otros exprisioneros

El exprecandidato presidencial Juan Sebastián Chamorro declaró que las autoridades nicaragüenses en ningún momento le comunicaron que sería desterrado de su país. Él al igual que otros pensó que lo llevarían a la cárcel La Modelo.

Miembros de la familia Chamorro, entre ellos el periodista Carlos Fernando Chamorro, recibieron a sus familiares. Ninguno sabía nada de la liberación.

“Nos montaron en unos buses y no sabíamos a dónde íbamos. Algunos de nosotros pensábamos que íbamos a la cárcel Modelo y, en ese momento, los tres buses que transportaban a los presos que venían de El Chipote dobló a la derecha, en la Fuerza Aérea. Ahí nos dimos cuenta que salíamos volando del país, no sabíamos a dónde”, relató Juan Sebastián Chamorro a medios que se congregaron en las afueras del hotel.

Por su parte, el excandidato presidencial Felix Madariaga habló en el salón improvisado con un mensaje que alentaba a no tener odio. Dijo estar profundamente emocionado y al saber sobre el destierro declaró que Nicaragua se lleva en la sangre.

Algunos de los excarcelados mostraban un pasaporte. De acuerdo con testimonios, recibieron el documento en el aeropuerto en Managua. Dos de los pasaportes a los que tuvo acceso Efecto Cocuyo tenían fecha de emisión del 2 de febrero de 2023 y 4 de febrero de 2023.

Sobre su situación en Estados Unidos recibieron una medida humanitaria que les permite estar legalmente en el país.

Los despojaron de su nacionalidad

Los desterrados desconocían que este mismo jueves habían sido despojados de la nacionalidad nicaragüense.

A las 7:00 p.m., más de 6 horas de haber aterrizado en territorio estadounidense, todavía faltaban por procesar al menos una decena de ex presos. Algunos de los rezagados no habían salido nunca de Nicaragua.

«Ahora son libres«, comentó un funcionario del Departamento de Estado. Pero, todavía muchos no saben cuáles serán sus próximos pasos.

J.T. dice que está tan emocionado que no durmió ni un segundo. » Ni tengo sueño». Sus familiares siguen en Nicaragua. Él no está seguro de lo que hará en los próximos días.