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El periodista y activista político Roland Carreño cumple dos años preso este miércoles 26 de octubre.

Desde su detención en el año 2020, el miembro del partido Voluntad Popular espera por un juicio, bajo la acusación de delitos de «conspiración, tráfico ilícito de armas de guerra, legitimación de capitales y asociación para delinquir».

Su aprehensión en Caracas se produjo dos días después de que el fundador de ese partido, Leopoldo López, logró salir de la embajada de España en Caracas y se marchó al exilio en ese país.

El proceso judicial, denuncian sus abogados y familiares, ha estado lleno de irregularidades.

En dos oportunidades sufrió de desaparición forzada; la primera cuando lo detuvieron el 26 de octubre de 2020 y después el 6 de enero de 2021. En esta última fecha, un juez ordenó su traslado desde la sede de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) en La Yaguara hasta la estación policial de este cuerpo de seguridad en Maripérez, donde se encuentra desde entonces.

Su hermana Farah Carolina Miranda dijo en Twitter que su detención «es injusta y arbitraria», una de las razones por las que la Misión de Determinación de Hechos sobre Venezuela se ha pronunciado en contra del gobierno de Nicolás Maduro, por violaciones a los derechos humanos de las y los presos políticos en el país.

Proceso con retraso e irregularidades

La organización Instituto de Prensa y Sociedad Venezuela (Ipys-Venezuela) recordó otras irregularidades del proceso, documentadas por su defensa. Entre ellas destacan «la manipulación de pruebas y el retardo procesal».

Aunque el sistema penal venezolano establece que una persona debe ser presentada en tribunales a las 48 horas de su detención, la audiencia preliminar de Carreño se realizó nueve meses después de su privación de libertad, el 9 de julio de 2021. Además, el lapso para comenzar un juicio debe ser de 45 días y comenzó 19 meses después de ello, el 2 de mayo de 2022.

Ese día suspendieron la audiencia que se reprogramó para el 9 de mayo, una semana después de lo previsto.

«El Ministerio Público no pudo exponer claramente su teoría del caso, y es que honestamente no tiene teoría sobre el caso, ya que ni caso tiene», dijo en ese momento una de las abogadas de Carreño, María Alejandra Poleo.

Desde entonces el proceso avanza con diferimientos, falta de testigos o pruebas de parte del Ministerio Público. La última de las audiencias, que se esperaba para el 10 de octubre fue diferida y dos semanas después, Roland Carreño no ha vuelto a los tribunales.

«Ipys Venezuela exige libertad plena para Roland Carreño. La injusta privación de libertad del periodista y las irregularidades constatadas en su causa penal no solo significan el incumplimiento de las garantías al debido proceso, sino que evidencian el funcionamiento de las instituciones públicas al servicio de quienes detentan el poder, así como al patrón de hostigamiento judicial al que son sometidas la prensa y las voces disidentes«, dijo la ong.