La primera escuela sostenible de Venezuela se encuentra en el estado Carabobo, específicamente en la parroquia Central Tacarigua del municipio Carlos Arvelo. Es la Unidad Educativa María Virgen Misionera.
Con el propósito de establecer un modelo innovador de desarrollo sostenible, de adaptación climática y de sensibilización ambiental que permita a la comunidad escolar afrontar los problemas ambientales y energéticos que les afectan, la Embajada de Francia en el país y el equipo de Lata de Agua llevó a cabo este proyecto con el cual se beneficiarán más de 1.300 alumnos, más de 50 trabajadores del plantel y los adultos mayores de la comunidad aledaña.
Además está iniciativa se basa en innovaciones tecnológicas y programas de sensibilización diseñadas con la finalidad de preservar y restablecer el equilibrio entre la naturaleza y las necesidades humanas, para que los niños y los miembros de la comunidad educativa puedan aprender de estas tecnologías para utilizarlas y proveerse de unas condiciones ambientales mucho más armónicas.
«Es fundamental que empecemos a pensar en como nos vamos adaptar y a regenerar nuestros ecosistemas porque se trata de acciones propositivas, no es que nos adaptemos a una crisis o a una situación adversa, al revés, se trata de entender nuestro ecosistema, de crear belleza, de eso es la escuela sostenible», dijo el arquitecto, fundador y director de Lata de Agua, Laurencio Sánchez.
Añadió que «Además que «esto tiene un encanto porque cuenta tecnología de punta al alcance de sus manos para aprender y convertirse en ciudadanos resilientes, en ciudadanos sensibilizados en relación a sus problemas energéticos»
Con una inversión de 23 mil dólares que aportó la embajada francesa, la unidad educativa puede abastecerse de agua a través de la lluvia, uno de los principales problemas del plantel era la escasez de ese servicio y debido a su cercanía con el Lago de Valencia tampoco las condiciones del agua era la apta para el consumo.
A la Unidad Educativa María Virgen Misionera se instaló:
● Un sistema Lata de Agua de suministro a partir de la captación, tratamiento y almacenamiento de lluvia para mejorar la calidad de agua en la escuela.
● Pozos de infiltración para reducir las inundaciones de la escuela, recargar acuíferos y humedecer el suelo.
● Un calentador solar de agua para surtir del líquido caliente a la cocina y las duchas de la escuela.
● Un sistema fotovoltaico para refrigerar alimentos del comedor escolar y energizar la bomba de agua del sistema Lata de Agua.
En paralelo a estas acciones, también, se promueven actividades de sensibilización, educación y concienciación con:
● El programa Llueve y Aprendo para sensibilizar hacia el cuidado del medio ambiente, el uso de energías alternativas, el reciclaje y adaptación climática.
● Un mural con un diseño alusivo al desarrollo sostenible.
● Un manual docente para escuelas sostenibles, que pueden usar todas las escuelas del país.
«Es educación con inclusión social, para nosotros es fundamental estar presente y apoyar proyectos de este tipo y sobre todo en sectores populares para favorecer el uso de energía sostenible, recuperar el agua de lluvia porque se puede a hacer muchas cosas no solo para la unidad educativa sino para la comunidad», añadió sobre la escuela sostenible el embajador de Francia en el país, Romain Nadal.
El diplomático agregó que «aquí se construye el futuro no solamente de Venezuela sino de la humanidad porque luchamos con el cambio climático y hay que multiplicar el uso de las energías sostenibles y la recuperación del agua que es un tesoro escaso en el planeta».
Aunque la Unidad Educativa María Virgen Misionera se convirtió en la primera escuela sostenible de Venezuela por todo lo que comprende el proyecto, esta iniciativa con la Embajada de Francia y Lata de Agua empezó en Caracas.
En Petare se desarrolló en Barrio Nuevo, en el año 2020, con la instalación del sistema Tinajero Lata de Agua en las escuelas EBN-Pedro Felipe Camejo, el CEIN Fermín Toro y en el ambulatorio Las Casitas.
Además, se instalaron en cada escuela lavamanos, que funcionan con agua de lluvia, para prevenir el COVID-19. Posteriormente, en el año 2022, se inauguró el Tinajero Agrícola en la Escuela Nuestra Señora del Encuentro en el Mirador del Este.
Este proyecto busca una solución armónica y respetuosa con el medio ambiente al grave problema de escasez del agua en Venezuela, involucrando a las comunidades en la solución de sus problemas hídricos.
Fin de año escolar: cuánto pueden costar las vacaciones en Venezuela
ONU ofrece ayuda humanitaria a más de 1 millón de venezolanos entre enero y mayo
Padre Arturo Sosa: Maduración ciudadana es clave para contribuir con la democracia
Guayoyo con Cocuyo sobre cambio climático se hará en el Techo Verde de la Ucab
Militares desalojan a 850 mineros ilegales de una reserva forestal de Bolívar y Delta Amacuro
Candidatos a primarias se reunirán para acordar estrategia frente a inhabilitaciones y otros obstáculos
Julio tendrá grandes estrenos en cine y series con Misión Imposible, The Witcher más Star Wars: Ahsoka
Argentina abrió investigación por violaciones de DDHH en Venezuela
Una migrante ecuatoriana muerta y 17 lesionados deja accidente de tráfico en Nicaragua
Comisión Europea: La inhabilitación de opositores en Venezuela «sumamente preocupante»
La primera escuela sostenible de Venezuela se encuentra en el estado Carabobo, específicamente en la parroquia Central Tacarigua del municipio Carlos Arvelo. Es la Unidad Educativa María Virgen Misionera.
Con el propósito de establecer un modelo innovador de desarrollo sostenible, de adaptación climática y de sensibilización ambiental que permita a la comunidad escolar afrontar los problemas ambientales y energéticos que les afectan, la Embajada de Francia en el país y el equipo de Lata de Agua llevó a cabo este proyecto con el cual se beneficiarán más de 1.300 alumnos, más de 50 trabajadores del plantel y los adultos mayores de la comunidad aledaña.
Además está iniciativa se basa en innovaciones tecnológicas y programas de sensibilización diseñadas con la finalidad de preservar y restablecer el equilibrio entre la naturaleza y las necesidades humanas, para que los niños y los miembros de la comunidad educativa puedan aprender de estas tecnologías para utilizarlas y proveerse de unas condiciones ambientales mucho más armónicas.
«Es fundamental que empecemos a pensar en como nos vamos adaptar y a regenerar nuestros ecosistemas porque se trata de acciones propositivas, no es que nos adaptemos a una crisis o a una situación adversa, al revés, se trata de entender nuestro ecosistema, de crear belleza, de eso es la escuela sostenible», dijo el arquitecto, fundador y director de Lata de Agua, Laurencio Sánchez.
Añadió que «Además que «esto tiene un encanto porque cuenta tecnología de punta al alcance de sus manos para aprender y convertirse en ciudadanos resilientes, en ciudadanos sensibilizados en relación a sus problemas energéticos»
Con una inversión de 23 mil dólares que aportó la embajada francesa, la unidad educativa puede abastecerse de agua a través de la lluvia, uno de los principales problemas del plantel era la escasez de ese servicio y debido a su cercanía con el Lago de Valencia tampoco las condiciones del agua era la apta para el consumo.
A la Unidad Educativa María Virgen Misionera se instaló:
● Un sistema Lata de Agua de suministro a partir de la captación, tratamiento y almacenamiento de lluvia para mejorar la calidad de agua en la escuela.
● Pozos de infiltración para reducir las inundaciones de la escuela, recargar acuíferos y humedecer el suelo.
● Un calentador solar de agua para surtir del líquido caliente a la cocina y las duchas de la escuela.
● Un sistema fotovoltaico para refrigerar alimentos del comedor escolar y energizar la bomba de agua del sistema Lata de Agua.
En paralelo a estas acciones, también, se promueven actividades de sensibilización, educación y concienciación con:
● El programa Llueve y Aprendo para sensibilizar hacia el cuidado del medio ambiente, el uso de energías alternativas, el reciclaje y adaptación climática.
● Un mural con un diseño alusivo al desarrollo sostenible.
● Un manual docente para escuelas sostenibles, que pueden usar todas las escuelas del país.
«Es educación con inclusión social, para nosotros es fundamental estar presente y apoyar proyectos de este tipo y sobre todo en sectores populares para favorecer el uso de energía sostenible, recuperar el agua de lluvia porque se puede a hacer muchas cosas no solo para la unidad educativa sino para la comunidad», añadió sobre la escuela sostenible el embajador de Francia en el país, Romain Nadal.
El diplomático agregó que «aquí se construye el futuro no solamente de Venezuela sino de la humanidad porque luchamos con el cambio climático y hay que multiplicar el uso de las energías sostenibles y la recuperación del agua que es un tesoro escaso en el planeta».
Aunque la Unidad Educativa María Virgen Misionera se convirtió en la primera escuela sostenible de Venezuela por todo lo que comprende el proyecto, esta iniciativa con la Embajada de Francia y Lata de Agua empezó en Caracas.
En Petare se desarrolló en Barrio Nuevo, en el año 2020, con la instalación del sistema Tinajero Lata de Agua en las escuelas EBN-Pedro Felipe Camejo, el CEIN Fermín Toro y en el ambulatorio Las Casitas.
Además, se instalaron en cada escuela lavamanos, que funcionan con agua de lluvia, para prevenir el COVID-19. Posteriormente, en el año 2022, se inauguró el Tinajero Agrícola en la Escuela Nuestra Señora del Encuentro en el Mirador del Este.
Este proyecto busca una solución armónica y respetuosa con el medio ambiente al grave problema de escasez del agua en Venezuela, involucrando a las comunidades en la solución de sus problemas hídricos.