El jefe de la delegación de la Plataforma Unitaria para el diálogo, Gerardo Blyde, opina que hay “altísimas probabilidades de un pronto regreso a la negociación” bajo los términos establecidos en el memorándum de entendimiento que cumple un año de haber sido suscrito en México.
El abogado afirmó, en entrevista concedida al periodista Román Lozinski, que “se ha estado construyendo un camino para regresar a la negociación con la facilitación de Noruega” y que el gobierno de Nicolás Maduro “tiene disposición de llegar al proceso”.
La declaración constrasta con la nueva condición que impone el oficialista Jorge Rodríguez para reiniciar las conversaciones. El presidente de la Asamblea Nacional exige la devolución del avión venezolano iraní que está retenido en Argentina por presuntos vínculos con el terrorismo.
La liberación del empresario Álex Saab, a quien el gobierno de Nicolás Maduro da estatus de representante diplomático, es otra de las demandas para retomar la negociación.
Blyde enumeró tres motivos por los que el chavismo estaría interesado en volver a la mesa de México. Estas son:
1️⃣ Legitimidad internacional. “Ante el mundo democrático y occidental, Maduro tiene problemas de legitimidad serios por la forma en la que fue celebrado ese proceso de 2018 (elecciones presidenciales) en la que eligió cómo competir, contra quien y cuando, eliminado la posibilidad de tener adversarios que pudieran vencerlo con condiciones mínimas democráticas”, sostiene el opositor.
2️⃣ Estabilización de la economía y recursos. El vocero de la Plataforma Unitaria argumenta que el gobierno de Maduro tiene un problema económico estructural y que un proceso de negociación le permitiría retomar la venta de petróleo en el mercado abierto «y no por ejemplo 40% por debajo del precio en un mercado negro en el que los ‘amigos’ se están aprovechando».
3️⃣ Reconstrucción de Venezuela. “Lograr un espacio de garantías para la reconstrucción y reconstitución del país que evite que, cuando se produzca alternatibilidad del poder, no siga nadie pisando a otro y utlizado el poder para pisar a otro”, expuso.
«Hay que entender los tiempos y los cambios que esos tiempos traen. La posición de Estados Unidos, nuestro principal aliado en la lucha por la democracia, cambió con la nueva administración. Han visto las sanciones como una herramienta de presión que no ha sido suficiente para lograr un cambio político en Venezuela, pero sí para que se retome el proceso de negociación en favor de los venezolanos”, agregó.
El opositor Juan Guaidó, reconocido por algunos países como presidente interino de Venezuela, confirmó a la prensa la presencia en el país de una delegación enviada por Noruega.
Trascendió que el Reino de Noruega también designó a un oficial diplomático en reciprocidad al nombramiento de Ramón Gordils como embajador de Venezuela en Noruega. La designación fue autorizada por la Asamblea Nacional de mayoría chavista, el pasado 2 de agosto.
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El jefe de la delegación de la Plataforma Unitaria para el diálogo, Gerardo Blyde, opina que hay “altísimas probabilidades de un pronto regreso a la negociación” bajo los términos establecidos en el memorándum de entendimiento que cumple un año de haber sido suscrito en México.
El abogado afirmó, en entrevista concedida al periodista Román Lozinski, que “se ha estado construyendo un camino para regresar a la negociación con la facilitación de Noruega” y que el gobierno de Nicolás Maduro “tiene disposición de llegar al proceso”.
La declaración constrasta con la nueva condición que impone el oficialista Jorge Rodríguez para reiniciar las conversaciones. El presidente de la Asamblea Nacional exige la devolución del avión venezolano iraní que está retenido en Argentina por presuntos vínculos con el terrorismo.
La liberación del empresario Álex Saab, a quien el gobierno de Nicolás Maduro da estatus de representante diplomático, es otra de las demandas para retomar la negociación.
Blyde enumeró tres motivos por los que el chavismo estaría interesado en volver a la mesa de México. Estas son:
1️⃣ Legitimidad internacional. “Ante el mundo democrático y occidental, Maduro tiene problemas de legitimidad serios por la forma en la que fue celebrado ese proceso de 2018 (elecciones presidenciales) en la que eligió cómo competir, contra quien y cuando, eliminado la posibilidad de tener adversarios que pudieran vencerlo con condiciones mínimas democráticas”, sostiene el opositor.
2️⃣ Estabilización de la economía y recursos. El vocero de la Plataforma Unitaria argumenta que el gobierno de Maduro tiene un problema económico estructural y que un proceso de negociación le permitiría retomar la venta de petróleo en el mercado abierto «y no por ejemplo 40% por debajo del precio en un mercado negro en el que los ‘amigos’ se están aprovechando».
3️⃣ Reconstrucción de Venezuela. “Lograr un espacio de garantías para la reconstrucción y reconstitución del país que evite que, cuando se produzca alternatibilidad del poder, no siga nadie pisando a otro y utlizado el poder para pisar a otro”, expuso.
«Hay que entender los tiempos y los cambios que esos tiempos traen. La posición de Estados Unidos, nuestro principal aliado en la lucha por la democracia, cambió con la nueva administración. Han visto las sanciones como una herramienta de presión que no ha sido suficiente para lograr un cambio político en Venezuela, pero sí para que se retome el proceso de negociación en favor de los venezolanos”, agregó.
El opositor Juan Guaidó, reconocido por algunos países como presidente interino de Venezuela, confirmó a la prensa la presencia en el país de una delegación enviada por Noruega.
Trascendió que el Reino de Noruega también designó a un oficial diplomático en reciprocidad al nombramiento de Ramón Gordils como embajador de Venezuela en Noruega. La designación fue autorizada por la Asamblea Nacional de mayoría chavista, el pasado 2 de agosto.