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Una veintena de países asistió a la Conferencia Internacional sobre el Proceso Político en Venezuela, convocada por el gobierno de Colombia en Bogotá este 25 de abril.

Los países invitados a través de cancilleres, embajadores y altos funcionarios, fueron Alemania, Argentina, Barbados, Bolivia, Brasil, Canadá , Chile, España, Estados Unidos, Francia, Honduras, Italia, México (país sede de negociones entre gobierno y oposición venezolanos), Noruega (país facilitador de negociaciones en México), Portugal, Reino Unido, San Vicente y las Granadinas, Sudáfrica, Turquía y el Alto Representantes de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.

Te contamos: Conferencia sobre Venezuela pide celebrar elecciones, levantar sanciones y continuar diálogo en México

Tras las palabras de instalación del presidente Gustavo Petro desde el Palacio de San Carlos, sede de la Cancillería colombiana, se instó a los medios de comunicación que cubrían el evento a abandonar el espacio para «continuar con la agenda» de la conferencia, por lo que las intervenciones de los países no fueron transmitidas en vivo.

¿Qué dijo Josep Borrell?

Sin embargo, algunas declaraciones de representantes de algunos países antes de entrar al recinto dejaron ver parte de lo que sería la tendencia en el encuentro y que coincidieron con palabras iniciales de Petro: promover el regreso a México, un cronograma electoral con garantías y un cronograma de levantamiento paulatino de sanciones internacionales contra el gobierno de Nicolás Maduro.

A diferencia de cancilleres, funcionarios y embajadores, Borrell se detuvo a hablar con la prensa presente en el lugar.

«En su conjunto, vamos a ver de qué manera podemos, entre todos, en particular los países latinoamericanos que son los que tienen más interés y están más cerca del problema, impulsar la vuelta a la vía democrática de Venezuela, desde la base de los acuerdos entre venezolanos», declaró Borrell antes de entrar a la conferencia.

Al ser consultado sobre el incidente con el opositor Juan Guaidó, quien denunció haber sido expulsado de Colombia bajo amenaza la noche anterior el evento, Borrell pidió no perder de vista el «objetivo fundamental» de la conferencia que es impulsar las negociaciones que están «encalladas» en México continúen y que el acuerdo humanitario que implica el desembolso de 3.000.000 de dólares para áreas prioritarias, se aplique.

«Es evidente que un proceso de normalización democrática tiene que ir acompañado de un levantamiento gradual de las acciones, todo consiste en saber el cuándo y el cómo», agregó.

Acuerdos y esperanza

Sin detener el paso apurado, el canciller argentino Santiago Cafiero dijo a W Radio Colombia que del encuentro internacional espera un acuerdo para elecciones libres y levantamiento de sanciones.

Igualmente, el embajador de Francia en Venezuela, Romain Nadal, se limitó a expresar que apuesta por «mucha esperanza para Venezuela».

La tendencia fue confirmada por el canciller colombiano, Álvaro Leyva, al leer las conclusiones de la conferencia al final de la tarde: promover un cronograma electoral que permita elecciones libres y transparentes, levantamiento progresivo de sanciones previo cumplimiento de acuerdos, que sigan conversaciones en México con el acompañamiento de Noruega y que se destrabe el desembolso 3.000.000 de dólares del acuerdo humanitario suscrito entre gobierno y oposición venezolanos, en noviembre de 2022.

Extraoficialmente se supo que la representación de Estados Unidos en la persona del asesor principal adjunto de Seguridad Nacional, Jonathan Finer, estuvo de acuerdo con el levantamiento de sanciones en la medida en que se estableciera un cronograma electoral con garantías.