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 El canciller de Venezuela, Yván Gil, catalogó como un «zarpazo» a la conferencia internacional sobre el país caribeño en Bogotá, celebrada la semana pasada con el objetivo de reactivar el diálogo entre el Gobierno y la oposición, la decisión del Departamento del Tesoro de Estados Unidos de no tomar «medidas coercitivas» para bloquear la subasta o un acuerdo negociado sobre Citgo, filial de la petrolera Pdvsa en EE.UU.

«Hemos expresado la burla que ha significado esta licencia en contra del espíritu de la reunión convocada por el presidente (Gustavo) Petro», señaló el canciller, citado en una nota de prensa, luego de reunirse con representantes diplomáticos que participaron en la reunión de Bogotá.

Gil hace referencia a la licencia general número 42, emitida el lunes, que autoriza al Parlamento del período 2016-2021, formado por una amplia mayoría opositora y relevado en 2021 por un Legislativo de mayoría chavista, a efectuar «ciertas transacciones» en relación con «cualquier deuda del Gobierno de Venezuela», Pdvsa o «cualquier entidad» en la que la estatal posea «una participación del 50 % o más».

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La decisión también permite la «negociación de acuerdos de conciliación» con personas designadas por este Legislativo, considerado por EE.UU. como la última institución elegida democráticamente en Venezuela.

Ante esto, el canciller dijo que el resultado una semana después de la conferencia internacional, en la que participaron 18 países, entre ellos EE.UU., «ha sido esta licencia que trata de consumar un robo de nuestra principal industria en ese país, como es Citgo».

El canciller afirmó que seguirán informando a cada una de las cancillerías la situación que implica el «abuso» de EE.UU. con esta licencia «contraria a la legislación internacional y a la Constitución bolivariana».

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El pasado 25 de abril, se celebró en Colombia una conferencia internacional, convocada por el presidente Gustavo Petro, con el objetivo de desatascar el proceso de diálogo entre el Gobierno venezolano y la oposición, suspendido desde noviembre.

Los 18 países participantes coincidieron en la necesidad de establecer un cronograma para elecciones libres y un levantamiento progresivo de las sanciones que pesan sobre Venezuela.

Igualmente, consideraron necesaria «la continuación del proceso de negociación facilitado por el Reino de Noruega que ha tenido lugar en México», y que esta «sea acompañada con la aceleración de la implementación del fondo fiduciario único para la inversión social en Venezuela», dijo el canciller colombiano, Álvaro Leyva, al leer la declaración final de la reunión.