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Por lo menos, 39 efectivos o funcionarios de seguridad del Estado venezolano han sido asesinados entre los meses de enero y las primeras semanas del mes de julio. El estado Miranda fue el que registró mayores homicidios contra funcionarios policiales y militares.

Un monitoreo de prensa realizado por Efecto Cocuyo y datos obtenidos de fuentes policiales revelan que en la entidad mirandina por lo menos 11 funcionarios perdieron la vida en lo que va de año. El estado Aragua se ubica en segundo lugar, con seis muertes de funcionarios.

El Distrito Capital y el estado Carabobo registraron cinco muertes respectivamente en ese periodo, mientras que en los estados Bolívar, Anzoátegui, Monagas, Sucre y Zulia hubo registro de 2 funcionarios asesinados en cada una de esas entidades.

En las regiones llaneras de Apure y Barinas se contabilizaron un funcionario de seguridad, respectivamente, asesinado en este primer semestre del año.

Haga clic sobre los iconos para conocer los detalles de los asesinatos. 

Trimestre sangriento

En Venezuela desde el año 2015 no se hace pública las cifras oficiales de funcionarios que son víctimas de homicidios. Los últimos números fueron suministrados por el Ministerio Público y establecían 359 casos en promedio, desde el año 2012 hasta el 2016.

En el primer trimestre de este año al menos 26 funcionarios fueron asesinados y el estado Miranda lideró las muertes violentas contra efectivos de seguridad, mientras que en el periodo que comprende los meses de abril, mayo, junio y los 10 primero días del mes de julio se contabilizaron 13 funcionarios muertos.

Cuatro funcionarios de seguridad fueron asesinados en abril

Según el registro por lo menos 29 policías han muerto de forma violenta; de ese número 15 eran funcionarios de policías estadales, 11 pertenecían a la Policía Nacional Bolivariana y tres eran miembros de municipales.

La Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb) acumula siete efectivos asesinados; cuatro pertenecen al Ejército y tres de pertenecen a la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), mientras que el Cuerpo de Investigaciones Científica, Penales y Criminalísticas registra tres funcionarios asesinados.

Los casos más violentos

Uno de los casos que más impactó durante este primer semestre del año fue el asesinato de Ismael Burgillos, un funcionario de la PNB, que fue encontrado decapitado y con múltiples disparos en diferentes parte de su cuerpo la mañana del 24 de abril, en una zona boscosa del sector La Defensa, en Barlovento, Miranda.

Burguillos estaba adscrito a la Dirección contra la Delincuencia Organizada en esa región.

Un funcionario de la Policía de Miranda que se entrevistó con Efecto Cocuyo y prefirió quedar en el anonimato indicó que, aunque las muertes de funcionarios de seguridad no son tan frecuentes como en otros países de la región, preocupa que muchas sedes policiales y los propios efectivos de seguridad no tengan equipamiento adecuado para enfrentar diversas situaciones.

“Nosotros no tenemos claro a cuántos policías asesinan en nuestro país, nos enteramos por otras vías pero no hay una cifra oficial y eso es lamentable”, dijo el funcionario.

Durante los últimos días del mes de julio, fueron imputados dos funcionarios de la Dirección de Contrainteligencia Militar (Dgcim), por el asesinato contra el detective del Cicpc, Juan Ángel Pantoja, mientras era torturado en el estado Sucre.

En este primer semestre y las dos primeras semanas de julio, al menos dos mujeres funcionarias fueron asesinadas en el país. Una de las víctimas quedó identificada como Jesuris Yeseire Torres La Cruz, de 22 años de edad, quien murió el 12 de febrero, en la ciudad de Barinas, estado Barinas. La funcionaria de la Policía Nacional Bolivariana es la primera mujer policía en ser asesinada en lo que va de año.

La segunda víctima quedó identificada como  Rosibel Alejandra Rojas Veloza, de 20 años de edad, quien murió tras recibir un disparo en el rostro de forma “accidental”, cuando un funcionario de la Policía del estado Aragua manipulaba su arma de reglamento durante una fiesta.