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Este viernes 5 de agosto arribaron a Nueva York, Estados Unidos, los primeros migrantes que entran por Texas, a quienes el gobernador republicano de este último estado, Greg Abbott, saca de su región.

El mismo Abbott dijo el viernes que el primer autobús llegaría el 5 de agosto a la metrópoli estadounidense, pese a la condena del alcalde de esta ciudad, el demócrata Eric Adams.

“Además de Washington, DC, la ciudad de Nueva York es el destino ideal para estos migrantes, quienes pueden recibir la abundancia de servicios y viviendas de la ciudad de los que el alcalde Eric Adams se ha jactado dentro de la ciudad santuario”, dijo Abbott en un comunicado de prensa que cita el diario Texas Tribune.

Abbott, un acérrimo opositor de las políticas migratorias del presidente Joe Biden, comenzó a enviar a los migrantes que entran sin documentos por la frontera sur a Washington desde el pasado mes de abril. En su momento llegó a amenazar con mandarlos también a Delaware, lugar de descanso del mandatario demócrata.

Condena a decisión del gobernador

Pero su decisión de enviarlos a Nueva York es la primera que se produce en medio de su política, que organizaciones defensoras de migrantes y derechos humanos, condenan.

“Espero que cumpla su promesa de dar la bienvenida a todos los migrantes con los brazos abiertos para que nuestras ciudades fronterizas invadidas y abrumadas puedan encontrar alivio”, aseguró el republicano en su comunicado de prensa.

Abbott invitó a Adams y a la alcaldesa de DC, Muriel Bowser, a recorrer con él la frontera entre Estados Unidos y México, propuesta que de plano rechazaron los demócratas.

El vocero de Adams, Fabien Levy, dijo en Twitter que esta ciudad recibirá a los migrantes, pese a que el alcalde sigue pidiendo ayuda federal para enfrentar el flujo de personas que intencionalmente les envían desde Texas.

Primeros 54 migrantes

«Muchos de los inmigrantes con los que hemos hablado no sabían lo que estaba pasando. Llegan a Nueva York y no saben qué hacer. Algunos tienen familia y se quedan con ellos», pero la mayoría va al sistema de albergues, dijo el comisionado de la Oficina de Asuntos del Inmigrante de la ciudad, el mexicano Manuel Castro, quien estuvo presente para recibirlos junto a otras autoridades y voluntarios de ONG.

Entre esos migrantes había venezolanos, bolivianos y hondureños. Castro aseguró que este lunes 8 de agosto tendrán una reunión con representantes del Congreso, en demanda de más dinero para atender a las personas migrantes.

«Necesitamos el apoyo del Gobierno federal, ya tenemos 4.000 en el sistema de albergues y todo por un gobernador que está jugando con las vidas de estas personas», sostuvo.

Con información de Texas Tribune y Efe