El presidente de Chile, Gabriel Boric, aseguró este 29 de julio que su país no reconocerá resultados electorales que no sean verificables en Venezuela, minutos después de que el Consejo Nacional Electoral (CNE) diera como ganador a Nicolás Maduro en las presidenciales venezolanas, a pesar de las denuncias de la oposición de que no se transmitieron la totalidad de las actas.
Boric aseguró que los datos ofrecidos por el ente electoral son «difíciles de creer» y exigió transparencia. El presidente del CNE, Elvis Amoroso, anunció el primer boletín de los resultados de las elecciones de 2024 y expresó que Maduro obtuvo 5.150.092 (51,20%) votos con el 80 % de las actas escrutadas.
Amoroso indicó que en segundo lugar quedó el candidato de la Plataforma Unitaria Democrática, Edmundo González, quien según estas cifras logró 4.445.978 (44,2%).
«El régimen de Maduro debe entender que los resultados que publica son difíciles de creer. La comunidad internacional y sobre todo el pueblo venezolano, incluyendo a los millones de venezolanos en el exilio, exigimos total transparencia de las actas y el proceso, y que veedores internacionales no comprometidos con el gobierno den cuenta de la veracidad de los resultados», publicó Boric a través de la red X.
Miles de venezolanos en Chile
De acuerdo con la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes (R4V), hay al menos 7,7 millones de venezolanos que han salido del país a causa de una crisis humanitaria compleja que se traduce en pésimos servicios, decadencia de los sectores de salud y educación, represión estatal, censura, inseguridad alimentaria y falta de medidas públicas para abordar los principales problemas.
Las cifras del R4V indican que Chile es el cuarto país con mayor cantidad de migrantes venezolanos, con al menos 532 mil.
El 28 de julio, cientos de connacionales residentes en territorio chileno acudieron a la embajada de Venezuela, ubicada en la comuna de Providencia, región Metropolitana, para ejercer su derecho al voto. Presidentes de otros países, también receptores de migrantes venezolanos (Colombia y Perú), se han pronunciado igualmente en contra del reciente anuncio del CNE.