Aunque falta más de un mes para el retorno a las aulas, los padres y representantes están desde ya en la búsqueda de uniformes y útiles a precios accesibles, pues el bolsillo sufre debido a los altos precios de estos artículos.
Las ferias escolares son alternativas para ese ahorro y es por ello que desde ya comienzan a instalarse en distintos puntos de las ciudades, como por ejemplo en Caracas, donde en céntricas zonas como Plaza Caracas, Diego Ibarra y el bulevar de Sabana Grande se ven comerciantes que venden todo lo concerniente para el año lectivo 2023-2024.
Desde cuadernos a un dólar hasta bolsos a 18 dólares se pueden encontrar en los numerosos toldos de la feria y, aunque ya tiene tres semanas, aún las ventas están “flojas”, según describen los comerciantes.
“Los precios están accesibles, la gente va comprando poco a poco dependiendo de su situación económica; porque ahorita todo lo que se hace es para comer. Uno se inventa promociones porque también hay que pagar lo invertido” dijo María San Martín, dueña de uno de estos puestos en la plaza ubicada en el Centro Simón Bolívar.
A pesar de que el año escolar pasado el sector educativo implementó un horario mosaico, por el bajo salario de los docentes, todavía algunos representantes compran por lista escolar.
“Compre la lista porque es lo que va a necesitar para estudiar; uno tiene que hacer lo posible para que tengan una buena formación. Gaste 16 dólares, pero es porque nada más tengo una hija”, dijo Kelly Ramírez, madre de una estudiante de primaria.
Una lista escolar que engloba cuadernos, colores, lápices, marcadores, entre otras cosas cuesta entre 17 a 40 dólares, dependiendo de la marca de los productos o si es para la etapa inicial o secundaria.
Los precios también varían de acuerdo a la calidad de la mercancía. Hay chemises a partir de 5 dólares, pantalones a 10 si son de poliéster y a 12 los de gabardinas; monos en 8 y franelas 3 por 5 dólares; todos los vendedores manejan casi los mismos precios.
“Todos tenemos que trabajar por igual para vender. Yo tengo mi papelería, pero uno se viene para acá para estar como más a la vista porque la gente acude más a las ferias, a lo que está en la calle” dijo Carmen Rojas.
Aunque algunos vendedores reconocen que estar en la calle tiene algunas desventajas, lo ven como mejor opción para incrementar sus ganancias
“La pandemia y la situación económica alejó a la gente de los mercados, tengo más de veinte años vendiendo ropa escolar en el mercado de San Martín y tuve que buscar opciones para tener ingresos, estar aquí es una forma y vender por Marketplace, pero aun así sigo en el mercado porque fabrico algunas cosas”, dijo Alexandra Calderón.
Sin embargo, los vendedores esperan que las semanas siguientes la venta aumente para recuperar lo invertido tanto en la mercancía como en el alquiler de los toldos