La Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela (FCU- UCV) exige al Estado venezolano que atienda las graves deficiencias que registran los comedores estudiantiles del país y pide reunirse con el relator especial de la ONU sobre el derecho a la alimentación, Michael Fakhri, para abordar el tema.
La escasez de recursos y el déficit presupuestario han causado que las universidades públicas venezolanas cierren sus comedores u ofrezcan comidas que no cumplen con los requisitos nutricionales. El 29 de enero de 2024, estudiantes denunciaron que en la UCV les sirven alimentos de baja calidad y en escasas cantidades.
“Hemos estado haciendo diversas exigencias al Ministerio de Educación Universitaria. Cuando uno va, envían de inmediato una tonelada de pollo, arroz o harina, pero luego volvemos a la misma dinámica de fallas. Ante esa realidad, estamos buscando generar acuerdos no solo con el Estado, sino con organizaciones del sistema internacional”, dijo Yonnathan Carrillo, presidente adjunto de la FCU, a Efecto Cocuyo.
El relator se encuentra en Venezuela desde el 31 de enero, para una visita de dos semanas en las que deberá evaluar la situación del sistema alimentario. El 6 de febrero un grupo de ucevistas acudió a la Oficina de Planificación Universitaria en Caracas para protestar por las fallas del comedor y exigió públicamente hablar con Fakhri.
“Tengo entendido que en el país se encuentra una delegación de la ONU, queremos reunirnos con la delegación para que se vea lo que ocurre. Ellos vinieron a ver cómo está el problema nutricional y alimentario del país, que vayan a ver en carne y hueso cómo comen los estudiantes de la UCV”, dijo Inyer Bellorín, secretario de Reivindicaciones de la FCU-UCV.
Bellorín aseguró que 12 mil estudiantes en la Universidad Central necesitan acceder al servicio del comedor diariamente, pero que los alimentos que envía el Estado solo alcanza para mil de ellos.
Qué pasa en el comedor de la UCV
Actualmente el comedor de la UCV no cuenta con presupuesto para comprar los insumos necesarios para funcionar con tres comidas diarias. Por ello, abre de lunes a jueves y solo presta servicio de almuerzo, al que accede un promedio de mil estudiantes por jornada, según cifras ofrecidas por Josue Hurtado, presidente de la Comisión de Usuario de la casa de estudios.
“Nos reunimos con la directora de Bienestar Estudiantil el pasado lunes 5 de febrero, donde le entregamos la estimación que tenemos de lo que se necesita para que el comedor funcione todo el año”, dijo Hurtado en entrevista con Efecto Cocuyo. En la reunión también estuvo presente la Directora General de Atención Estudiantil del Ministerio de Educación Universitaria, Iriana Ribas, y miembros de la Secretaría de la UCV.
Para febrero de 2024 se necesitan alrededor de 9 mil kilos de proteínas para que el comedor de la UCV pueda funcionar un mes, teniendo en cuenta que en el lugar se utilizan hasta 600 kilos en un solo servicio, agregó Hurtado. No obstante, mensualmente la institución recibe mil kilos aproximados del Estado.
“Todo lo que el comedor provee lo da el Ministerio, la Opsu. Hasta diciembre estuvo llegando proteínas, carbohidratos… En cantidades insuficientes, pero llegaban. En el documento que les entregamos explicamos que para que el menú sea equilibrado, debería de tener la proteína, el carbohidrato, la fruta, que sea agradable y el estudiante se alimente bien”, dijo Hurtado.
En 2016 el número de estudiantes beneficiados por el sistema de alimentación estudiantil superaba los 4 mil en la UCV, según los registros de la Comisión de Usuarios de la fecha. El 29 de noviembre de 2023, la Comisión Presidencial encargada de rehabilitar los espacios del campus en Caracas publicó que el comedor recibió a más de 2 mil alumnos.
“Se está dando solamente una comida y no está siendo balanceada. Y una comida que se da a veces tres días a la semana y el comedor abre tres semanas, cierra, dura varios días cerrado, luego vuelve a abrir y regresamos a la misma odisea”, añadió Yonnathan Carrillo sobre el tema.
En enero de 2024 jovenes afirmaron que no acudían al lugar porque no alcanzaban a llegar antes de que se acabaran los insumos.
“Tenemos aproximadamente mil estudiantes diarios. Sin embargo, siempre queda una estimación de estudiantes por fuera, de 100 o 200 estudiantes que no pueden disfrutar el servicio porque la comida diaria se agota”, puntualizó Hurtado.
Exigen soluciones inmediatas
Los estudiantes de la UCV exigen respuestas del gobierno de Nicolás Maduro no solo a la situación en su casa de estudios, sino en el resto de las instituciones universitarias del país.
Por ejemplo, a finales de 2023 en la Universidad Nacional Experimental Politécnica Antonio José de Sucre (Unexpo), sede de la Yaguara en Caracas, solo podían ofrecer tres microondas para que los estudiantes calentaran su comida, debido a que el comedor no operaba por falta de recursos.
“Estamos de acuerdo en la reunión que pidió la Federación de Estudiantes a la delegación de la ONU. De hecho, estamos trabajando en conjunto con el FCU para tratar de solventar la situación”, explicó Hurtado.
Hasta la fecha no hay respuestas oficiales del equipo de Michael Fakhri a la solicitud de los estudiantes, quienes se mantienen a la espera.