Ver más de

¿Cómo valoras esta información?

QUÉ CHÉVERE

QUÉ INDIGNANTE

QUÉ CHIMBO

Venezuela ha dejado de ser un país de jóvenes y el Estado no está implementando políticas para que los adultos mayores puedan vivir de forma digna, denunció la organización no gubernamental Convite este 21 de noviembre. Para 2022, el 12 % de la población venezolana tiene más de 60 años y se estima que el número aumentará a 20 % para 2050. 

«Es un momento crucial para tomar acciones para abordar lo que va a ser un sostenido proceso de envejecimiento de la población que va a tener repercusiones sociales y económicas en la dinámica de trabajo en el país», expresó Luis Francisco Cabezas, director general de Convite. 

Este lunes la asociación presentó los resultados de sus investigaciones «Derechos de las personas mayores: balance y consideraciones sobre su derecho a la salud, la educación y la recreación», en el marco del proyecto Monitoreo del Acceso a la Salud y el componente Envejecimiento Poblacional en Venezuela: una mirada panorámica actual. De acuerdo con este reporte, hay 3.599.938 personas de tercera edad en el país, del cual 56 % son mujeres y 44 % son hombres.

#ENPOVEN | 🗣️En #Convite queremos hacer visibles estos delicados temas para que formen parte de la agenda pública‼️

🔸La situación de las personas mayores debe ser tomada en cuenta hoy más que nunca. #ConviteXLaSalud pic.twitter.com/xLAq4nD4lT

— Convite A.C (@conviteac) November 21, 2022

Así mismo, la expectativa de vida en el territorio nacional es de 73,9 años. No obstante, investigadores de Convite informaron que de ese total un venezolano puede pasar hasta 9,5 años con algún problema de salud (crónico o discapacidad). El porcentaje de prevalencia de enfermedades es mayor en mujeres (89 %) que en hombres (80 %). 

Francelia Ruiz, directora de proyectos de la ONG, expresó que el Estado debe diseñar una política para adultos mayores y ampliar el análisis de la vejez como un problema público. 

«Urgen políticas para el envejecimiento digno del venezolano. De hecho, la última asignación ordinaria del plan de respuesta humanitaria para el país del Fondo Humanitario de Venezuela tiene como población priorizada a las personas mayores. Invitamos al gobierno que tome decisiones y que ponga el tema del envejecimiento como un punto importante en la agenda de derechos», dijo Ruiz a Efecto Cocuyo.

#ENPOVEN | Este #21Nov presentamos parte de nuestro ciclo de investigaciones⬇️

🔸Derechos de las personas mayores: balance y consideraciones sobre su derecho a la salud, la educación y la recreación.

🔸Hacia una política del envejecimiento digno. pic.twitter.com/CkMsbV9t7a

— Convite A.C (@conviteac) November 21, 2022

El viacrucis del acceso a la salud

Según el balance presentado este 21 de noviembre por Convite, 22 % de las personas de la tercera edad en Venezuela no tiene acceso a servicios de salud y 55 % de quienes tienen acceso a atención médica lo hace mediante ambulatorios o centros de bajo costo. Las enfermedades que más se repiten son la hipertensión, cardiopatías y las varices. 

«Una de las enfermedades que es mayor causa de discapacidad en hombres y mujeres es la diabetes mellitus. Desde los 60 años esta enfermedad tiene una alta incidencia, que va aumentando progresivamente. Otra de las condiciones son problemas de la visión, artritis, Alzheimer, entre otras», apuntó Marialejandra Barrientos, investigadora de Convite. 

Añadió que un 45 % de los adultos mayores compran los medicamentos con dificultad y un 21 % solo puede comprar algunos de los medicamentos recetados. 

«No hay atención médica de calidad o gratuita. Esto va de la mano con que el país destina apenas el 1,7 % del gasto público a los servicios de salud, lo que es un porcentaje muy bajo», dijo Barrientos. Señaló que el deficiente servicio sanitario hace que los afectados pospongan sus visitas a centros médicos y que las patologías o enfermedades empeoren. 

Sin acceso a Internet

El poco acceso a la salud no es el único problema que perjudica a la población mayor en Venezuela, advirtió Convite. La brecha digital entre generaciones y el inestable servicio de Internet también son desafíos a afrontar. 

«Las nuevas tecnologías han venido de la mano con formas históricas de discriminación y exclusión. Hasta 68 % de las personas mayores dicen no tener acceso a Internet en su hogar y este dato se vuelve aún más dramático cuando revisamos las diferencias territoriales», dijo Barrientos.

Agregó que en el estado Delta Amacuro el 100 % de los encuestados negó tener acceso a Internet. La situación vulnera la calidad de vida de los habitantes del estado y supone un tipo de discriminación por edad. 

Lea más en: Pobreza se reduce en Venezuela pero aumenta la desigualdad, según la Encovi 2022

«También vulnera el derecho que se tiene a acceder e involucrarse como parte activa de nuestra sociedad», puntualizó la investigadora. 

Recreación para adultos mayores

Finalmente, Convite emitió una serie de recomendaciones para el Estado venezolano con el fin de mejorar la calidad de vida de la población de adultos mayores. 

«Es necesario que se empiece a concebir todo el abanico de derechos que tienen las personas mayores y se empiece a respetar y trabajar en función de ello. Insistimos en la necesidad firmar la Convención Interamericana para la Protección de los Derechos Humanos de las Personas Mayores», dijo Barrientos. 

La organización convino que en que el país perdió su bono demográfico: el período en el que la población activa laboralmente supera en mayor porcentaje a la población dependiente. 

«Es fundamental empezar a trabajar en función de las acciones que son necesarias para una sociedad envejecida. Para pensar cómo cada uno puede ejercer sus derechos y estar representado dentro de la población», afirmó la investigadora.

Finalmente, Francelia Ruiz acotó que se debe garantizar la asistencia de programas de trabajo o recreación, promoción de programas de turismos y acompañamiento a nivel comunitario. 

«Los adultos mayores no están en precariedad porque son viejos, sino porque el Estado venezolano los ha obligado a envejecer sin una política de envejecimiento digno», expresó.