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Las autoridades de Venezuela declararon estado de alerta sanitaria en Anzoátegui, Miranda, Nueva Esparta, Vargas y Sucre por 90 días ante la presencia de influenza aviar en pelícanos silvestres de la costa del país.

Según informó este 2 de diciembre la ministra de Ciencia y Tecnología, Gabriela Jiménez, se detectó el virus de la influenza aviar A (H5N1) en pelícanos de la región norte costera del estado Anzoátegui, por lo cual desplegaron equipos técnicos para las labores de seguimiento y vigilancia.

Se trata del primer reporte de influenza aviar de alta patogenicidad (Iaap) en Venezuela, según la resolución conjunta 183/2022, emitida por los ministerios de Ciencia y Tecnología y Agricultura y Tierras, pues hasta la actualidad el país había sido libre de influenza aviar. 

De acuerdo con el documento, se identificaron signos clínicos y cuadro compatibles con influenza aviar en pelícanos en Puerto Píritu, en el municipio Fernando de Peñalver del estado Anzoátegui. Los resultados de laboratorio confirmaron que se trata del virus de la influenza tipo A subtipo H5.

Según explica el Ministerio de Ciencia y Tecnología, la influenza aviar de alta patogenicidad puede propagarse rápidamente, destruir más del 90 % de los grupos de aves de corral y devastar la industria avícola, además de generar graves restricciones comerciales.

«Incluso algunas cepas de la influenza aviar altamente patógena tienen la capacidad de infectar a las personas, representando una amenaza para la salud pública, siendo el principal factor de riesgo el contacto directo o indirecto con animales infectados o con ambientes y superficies contaminadas por heces», se lee en la resolución.

Las prohibiciones y otras medidas

Con la entrada en vigencia de la resolución, se prohíbe la movilización de aves vivas y huevos fértiles desde los municipios Fernando de Peñalver, San Juan de Capistrano, Manuel Ezequiel Bruzual y «otros que determine el Instituto Nacional de Salud Agrícola Integral (Insai)» a partir de los análisis de riesgo epidemiológico.

Entre las medidas a tomar también resaltan la cuarentena en los estados mencionados y la intensificación de la vigilancia epidemiológica en aves de traspatio y comerciales, al igual que el sacrificio sanitario de aves positivas para la influenza aviar, con contacto, con nexo epidemiológico o que generen alto riesgo sanitario para la transmisión viral en Venezuela.

Asimismo se ordena a la población general a notificar al Insai y otros entes estatales acerca de cualquier indicio o sospecha de signos de enfermedad o mortalidad en aves de cualquier especie por causas inusuales.

La resolución además llama a intensificar el monitoreo en fauna silvestre y prohíbe la realización de eventos gallísticos, ferias y exposiciones con presencia de aves y porcinos en Anzoátegui. Tampoco se podrá movilizar la gallinaza o pollinaza sin previa verificación y autorización por parte del Insai.

El documento además exhorta a sensibilizar a los criadores de aves de corral, población general, vendedores, cazadores y otros actores involucrados sobre la influenza aviar.

De acuerdo con las autoridades, se continuarán las actividades de monitoreo y vigilancia en zonas costeras, lagos, lagunas, ríos y zonas de alta densidad de aves. El Ministerio de Ciencia y Tecnología igualmente debe incorporar todos sus recursos técnicos y científicos para realizar las investigaciones requeridas en la vigilancia genómica de los virus de la gripe aviar.

Influenza aviar en la región

Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el subtipo H1N5 es el predominante en América en el periodo epidémico actual. En su alerta epidemiológica del 19 de noviembre, la OPS advirtió que por primera vez se ha registrado una «persistencia inusual del virus en aves silvestres durante los meses de verano» y se espera que el número de brotes aumente en los próximos meses.

La OPS explica que a nivel global se conocen 5 subtipos de virus de influenza aviar tipo A capaces de causar infecciones en humanos: virus H5, H6, H7, H9 y H10. 

En 2022, las autoridades de agricultura de Canadá, Colombia, Estados Unidos, México y Perú han detectado brotes en aves domésticas, de granjas avícolas o silvestres por el virus H5. Solo uno de los casos del año corresponde a humanos: una persona que participó en el sacrificio de aves en una instalación avícola comercial en Estados Unidos.

Desde su detección en 1996, los primeros brotes del virus A(H5N1) se habían limitado al sudeste asiático, mientras que en desde 2005 se propagaron hacia Europa y África. En América, los primeros brotes, pero de virus genéticamente diferentes a los que circulaban en Asia, se reportaron en Estados Unidos y Canadá entre 2014 y 2015.

Sobre la afectación en humanos, OPS explica que desde 2003 se notificaron más de 880 casos confirmados de influenza A (H5N1). Hasta 2017, la mayoría de los casos se concentraban en Indonesia y Egipto, con letalidades de 46 % y el 25 % respectivamente. Desde 2018 solo se han notificado 7 casos y 2 defunciones.