Ver más de

¿Cómo valoras esta información?

QUÉ CHÉVERE

QUÉ INDIGNANTE

QUÉ CHIMBO

De diferentes estilos, texturas y colores, los retratos producidos por la aplicación Lensa AI se hicieron populares tras transformar selfies en avatares digitales. 

Desde princesas animadas, hasta retratos en blanco y negro, Lensa AI (artificial intelligence o inteligencia artificial, en español) es una aplicación de edición de fotos que fue lanzada en 2018, pero que recientemente estrenó una nueva función: avatares mágicos. 

Por pagar $5,49 o $31,99 al año, los usuarios de la aplicación pueden acceder a esta función que les permite dibujar versiones de sí mismo con inteligencia artificial. 

Lensa AI también incluye otras funciones como: retoques en la piel, ajustes en los rasgos faciales, recuperar fotos de baja calidad o reemplazar el fondo de tu imagen. 

Básicamente las herramientas de la aplicación se dividen en tres: la edición de fotos, la de videos y “arte y diseño”, siendo esta última la más destacada en redes sociales. 

“¿Alguien dijo Picasso? Da rienda suelta a los artistas que llevas dentro con los estilos y filtros artísticos más novedosos del mundo” es lo que promete la descripción de la aplicación en la App Store. 

“Lensa utiliza Stable Diffusion, inteligencia artificial de código abierto que puede generar imágenes a partir de indicaciones de texto, para hacer que sus representaciones parezcan creadas por un artista, no por una computadora” explica el portal web Inquirer. 

El acceso a esta función tiene un costo adicional según la cantidad de imágenes que se desee. Para tener sus propios avatares, los usuarios deben de subir entre 10 a 20 fotos, seleccionar su género, la cantidad de fotos a editar y pagar; el proceso se tarda al menos 20 minutos. 

Cuando las imágenes estén listas podrán ser guardadas en la galería fotográfica; los resultados contemplan diferentes categorías como animé, ciencia ficción y superhéroes. 

Más allá de la imagen

Aunque la aplicación ha aumentado su popularidad y número de usuarios tras el auge de estas imágenes, también aparecieron muchas preguntas acerca de sus políticas de funcionamiento y privacidad. 

Las preocupaciones comienzan en el origen del arte que genera la aplicación y el destino de las fotos que los usuarios suben a la app. 

A través de su cuenta de Twitter, Lensa afirmó que “tan pronto como se generan los avatares, las fotos los usuario y el modelo asociado se borran permanentemente de nuestros servidores”. 

Un artículo de la CNBC explica que en los términos de servicio de Prisma Labs, propietarios de Lensa, dice que “la compañía no requiere ni solicita ningún metadato (información almacenada)”, pero que estos pueden asociarse con las fotos de forma predeterminada. 

La CNBC afirma que dicho postulado no explica si se está compartiendo la ubicación o los datos personales con la app, “incluso si lo hace sin querer”. 

Por otro lado, algunos artistas han criticado el funcionamiento de la aplicación, pues representa la disminución de su trabajo y presuntamente la falsificación del mismo; además, se les acusa de robar obras de artes de creadores digitales para crear las versiones descargables en la aplicación. 

Prisma Labs respondió en un hilo de Twitter (6 de diciembre) diciendo: “La IA aprende a reconocer las conexiones entre las imágenes y sus descripciones, no las obras de arte”. 

Afirmaron que no se pueden describir “como réplicas exactas de una obra en particular”, pero los artistas han decidido aprovechar sus redes sociales para explicar las razones por las que no se debería usar la aplicación.