Caracas. – La ofensiva de los orientales no ha respondido, en lo que va de la presente Serie del Caribe, como se esperaba. Los bates aborígenes no tienen la efectividad que demostraron durante la temporada de la LVBP, y esto ha sido la causa fundamental de las dos derrotas en fila que suman los venezolanos.
Mike Álvarez prefirió reforzar el pitcheo, y a juzgar por los resultados obtenidos ante Federales de Chiriquí y Criollos de Caguas, los dos equipos enfrentados por los nativos, los lanzadores han cumplido, aunque no de manera óptima.
Sin embargo, no han recibido del cuerpo de bateo el respaldo necesario.Se vio en el juego contra los panameños, como David Martínez y Maickol Guaipe permitieron 10 imparables en siete capítulos, recibiendo cinco de las seis anotaciones que lograron los federales.
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La defensa tuvo mala suerte, sobre todo con el hit conectado por Carlos Quiroz, lo cual trajo también sus consecuencias en la pizarra.Pero a la hora de enfrentar a Harold Arauz y Austin Warner en la lomita, no hubo reacción.
Apenas Williams Astudillo y Danry Vásquez -el único refuerzo ofensivo que tomó Álvarez- actuaron con contundencia. Arcía, Telis, Sardiñas y Castillo no pudieron mover la caja después del sexto episodio.La situación empeoró contra Puerto Rico, juego en el cual Arcía, Sardiñas, Castillo, Telis y Vásquez se quedaron en cero en las 15 ocasiones que estuvieron en el montículo.
Hay que reconocerle el crédito a Héctor Hernández, zurdo experimentado de los boricuas, quien lanzó cinco capítulos de manera impecable, y ante cuyos lanzamientos los bates nativos quedaron domados.Raúl Rivero asumió su responsabilidad en los 5.2 innings que lanzó, en los cuales permitió las tres carreras del encuentro.
El relevo Yapson Gómez, y la rotación de Ascanio y Bracho, también cumplió. El cuadrangular de Yadier Molina marcó, ciertamente, la diferencia. Pero fue el único estacazo del juego, aparte de otros cuatro incogibles conectados por los puertorriqueños. Los aborígenes, en cambio, no aportaron con el madero.
Probablemente, más adelante, Álvarez, en su balance, independientemente de que pueda o no corregir el rumbo actual del equipo, asuma que debió sumar más toleteros, y con ellos algunos guantes defensivos, antes de partir al campeonato.Hasta los momentos, la artillería indígena sigue adormecida. Se espera que en algún momento despierte.