EN
La Guaira.- Locutores, periodistas, deportistas y amigos del beisbolista y comentarista deportivo Carlos Castillo, hoy de 86 años de edad, iniciaron desde este sábado 10 de abril, una campaña para recaudar fondos que permitan comprar un concentrador de oxígeno, que la gloria deportiva requiere para poder seguir viviendo.
Castillo, quien fue jugador, coach y manager del equipo Tiburones de La Guaira y posteriormente comentarista en dupla con el recordado Delio Amado León, padece desde hace 20 años de una enfermedad pulmonar obstructiva crónica, lo que lo ha obligado a vivir con el concentrador de oxígeno.
La campaña se inició tras haberse hecho pública la estafa de la que fue objeto Castillo y su familia, quienes perdieron 490 dólares, que habían reunido para comprar un equipo a una supuesta distribuidora en Guanare, en el estado Portuguesa. La venta fue realizada a través de la cuenta @sales.vnzla1 en Instagram. Ese viernes 9 de abril, la familia de Castillo, interpuso la denuncia ante el CICPC La Guaira, detallando que la empresa se identificó como Active Sistem C.A., y que el pago fue realizado vía la aplicación Zelle al Bank of América al correo electrónico [email protected] de José Touzzo.
“Al conocer de esta situación, nos hemos organizado para iniciar una recaudación de fondos, desde varias plataformas. En cuentas nacionales para recibir bolívares, cuentas internacionales para la transferencia en dólares y una cuenta GodFundMe. Nuestra idea es apoyar a Don Carlos. Demostraremos a la familia que no están solos y que la fanaticada, los deportistas y la gente de Vargas y de Venezuela reconoce s trayectoria", comentó el también comentarista deportivo Atilano Hidalgo Peña, uno de los impulsores de la campaña.
Los hijos de Castillo aprovecharon para agradecer las muestras de apoyo a su padre e hicieron un llamado a las autoridades policiales nacionales. “Esperamos acciones contundentes por parte de los organismos de seguridad. Estas estafas que se burlan de la necesidad de las personas, con medicinas o equipos, son graves pues ponen en peligro la vida de las víctimas, , más allá de la pérdida de dinero", comentó Mirian Castillo.
