Una población considerable de 15.000 habitantes se encuentra en riesgo permanente de ser arrastrada por la creciente de las aguas del Orinoco en Delta Amacuro.
De acuerdo al testimonio de los moradores, las aguas se encuentran en su máximo nivel , fenómeno natural que pudiera traer consecuencias devastadores como ha ocurrido en los años anteriores en esta época del año.
Sin embargo, los cálculos y la proyección de los habitantes superan al pesimismo y creen que el río se encuentran estable y sin muchas variaciones en su movimiento de crecida en los últimos diez días. Aunque, otras opiniones son más reservadas y señalan que el Orinoco pudiera subir de nivel en los primeros días de septiembre y mandar a la profundidad a las comunidades del bajo y medio Delta.
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Ante esta situación de zozobra que afecta a la zona, la población espera la ayuda de la gobernación, Protección Civil y el Gobierno nacional con insumos alimenticios, medicina, agua potable y los enseres necesarios como hamacas, mosquiteros, colchonetas y otros insumos para los afectados que viven bajo la amenaza del río padre.
“Escasean los alimentos y los dispensarios se encuentran sin medicina; las enfermedades endémicas como la diarrea, vómito y la fiebre atacan a los niños y adultos”, asegura un habitante del sector.
De acuerdo al monitoreo realizado por el equipo de El Pitazo, las comunidades críticas que sufren los embates del Orinoco, se encuentran localizadas en los municipios Antonio Díaz y Tucupita, Los poblados de Araguaimujo, El Consejo, Los Tres Caños, Paloma del Toro, El Remanson, Araguao, las Tortugas, Pueblo Blanco, Mariusa y Boca de Latal, se encuentran asediadas por las aguas , con una población estimada de 5.000 habitantes. Requieren de atención y la asistencias de las instituciones gubernamentales.
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