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En medio de una crisis por falta de combustible que mantiene a miles de conductores haciendo cola a las afueras de las estaciones de servicio para poder abastecerse, el gobierno del estado Bolívar garantizó unidades de transporte para el traslado de los venezolanos que retornan al país por la frontera con Brasil, una vez cumplido el periodo de cuarentena.
La vigilancia por parte de las autoridades ha sido extrema en Santa Elena de Uairén, en vista de la cifra de contagios en el estado brasilero de Roraima, donde hasta este miércoles, 13 de mayo, habían 1.411 casos confirmados por COVID-19. Cientos de venezolanos que salieron de su territorio en busca de mejores oportunidades en el vecino país se han visto en la obligación de retornar tras quedar desempleados o sin vivienda.
El comandante de la Región Estratégica de Defensa Integral de Guayana (REDI), William Serantes Pinto, indicó mediante un boletín de prensa, difundido este 13 de mayo, que: «está garantizada la distribución de combustible para el retorno de los venezolanos una vez cumplan con las medidas establecidas». Señaló que, además de la frontera entre Brasil con Venezuela, se encuentran vigilantes ante el ingreso de venezolanos en las zonas limítrofes de Guyana, Colombia y Amazonas.
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El terminal de Santa Elena cumplió dos meses cerrado y los vehículos que trabajan de forma particular hasta Puerto Ordaz cobran 250 dólares por puesto. Ante la preocupación de personas que permanecen en los albergues por esta situación y la escasez de combustible, autoridades regionales aseguraron que serán transportados hasta sus lugares de residencia de forma gratuita.
En el mismo comunicado, el gobernador de Bolívar, Justo Noguera, indicó que en Santa Elena de Uairén hay 30 espacios habilitados, entre hoteles y posadas, para albergar a migrantes que regresan. Todas las personas que se movilizan por la frontera son sometidas a las pruebas rápidas para descartar COVID-19 y tanto los sospechosos, como los que dan negativo, son aislados en los mencionados recintos para que cumplan confinamiento de 15 días.
Asimismo, quienes resulten positivo permanecerán en Santa Elena hasta que se recuperen. Junto a los test de coronavirus, se les están aplicando pruebas de HIV, malaria y sífilis así como vacunas contra el sarampión.
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