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En horas de la tarde de este martes, 3 de diciembre, funcionarios del Ejército se llevaron detenidos a nueve hombres de la zona minera de Ikabarú, tras asegurar que guardan relación con la masacre perpetrada el pasado 23 de noviembre.
La situación volvió a despertar las alarmas entre pobladores de esta zona ubicada en la Gran Sabana, porque aseguraron que se trata de mineros que llevan años trabajando en dicho sector.
Además, tanto pobladores como indígenas de la zona detallaron que el fin de semana aprehendieron a Luis Eloy Acosta Castillo y Evimael Ozanin, este último uno de los heridos que dejó el tiroteo y el otro sería un testigo de los asesinatos.
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«Se los llevaron engañados, dijeron que se trataba de un operativo de rutina, que necesitaban el testimonio de los testigos y ellos accedieron, cuando los tenían en su comando los culparon y dijeron que se quedarían presos», relató un vecino de Ikabarú a El Pitazo, quien optó por no identificarse.
Hasta las 5:00 pm familiares de los nueve detenidos desconocían su paradero y el motivo de su aprehendieron. Temen que se trate de «una olla» para culparlos de la masacre. Entre los detenidos se encuentra un hombre de nacionalidad brasileña. Todos fueron trasladados a Puerto Ordaz.
El gobernador de Bolívar, Justo Noguera, quien dio parte de esta aprehensión, detalló que el herido resultó agraviado producto del intercambio de disparos, pese a que el testimonio del propio lesionado y de testigos apuntan a que fue atacado durante la llegada del grupo armado causante de la matanza.
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