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El Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) denunció que más de 200 presos padecen de deshidratación y enfermedades de la piel debido a la falta de agua en los diferentes centros de detención del estado Amazonas.
Mediante un comunicado, la organización señaló que los reclusos padecen de enfermedades, como escabiosis, al no tener acceso diario a la higiene, y a pesar de ser una enfermedad contagiosa, tampoco se les permite recibir tratamiento. El hedor también forma parte de la cotidianidad en las celdas debido a la acumulación de orina, heces y restos de comida.
Del mismo modo, el equipo de la OVP constató que hay detenidos con severos casos de deshidratación, que sumada a la mala alimentación recibida en los calabozos, ha deteriorado su estado de salud. De hecho, algunos están permanentemente casi desmayados.
El comunicado indica que en la mayoría de los centros de detención el servicio de agua por tuberías apenas llega tres veces a la semana. Aunque en algunas comisarías se contratan periódicamente camiones cisterna, son insuficientes para cubrir las necesidades de los presos y el personal que labora en ellos.
“A pesar de que nosotros les podemos llevar diariamente dos litros de agua, tan solo les alcanza para su consumo diario, no para sus necesidades y aseo personal; sin embargo, la tienen que usar para ello. Agregamos a esto que no todos los presos reciben algo de sus familiares, por lo que muchos no consumen ni agua", señaló el pariente de uno de los detenidos.
Hacinamiento
La OVP corroboró que 200 reclusos están distribuidos entre los seis centros de detención de Amazonas, de los cuales cinco presentan problemas críticos de hacinamiento.
La institución indicó que las celdas, diseñadas para albergar hasta 20 personas, tienen entre 50 y 70 presos, que por la falta de espacio deben turnarse para dormir o cuelgan sábanas a modo de hamacas entre los barrotes.
La ONG reveló que el centro con mayor cantidad de reclusos es la comisaría estadal del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), donde se encuentran 70 personas. Le sigue la comandancia de la Guardia Nacional (GN), con 50 presos, y los calabozos de Policía del estado Amazonas, con 48.
También señalaron que 22 reclusos están encerrados en una instalación conocida como El Muelle, donde opera la GN, 13 en la sede de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y 3 en la sede de la policía fronteriza.
Algunos familiares indicaron que el problema se debe a que los presos no son trasladados a tribunales por los funcionarios, quienes aseguran que no tienen gasolina ni vehículos suficientes. Tampoco reciben atención del plan Cayapa Judicial, para destrabar el retardo procesal.
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