Periodista vende helados en Tucupita mientras ejerce su profesión

Lleva más de 500 mil tomas fotográficas; entre ellas ha fotografiado a cinco mandatarios nacionales y diez regionales, en 29 años de ejercicio como profesional de la comunicación periodística

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Con 29 años de profesión periodística se ve obligado a vender helados en las calles de Tucupita | Foto: Melquiades Avila

Tucupita.- Raúl Pérez es un periodista gráfico que ejerce su profesión en las calles de Tucupita y plasma su testimonio y sus argumentos fotográficos para la historia. En tres décadas de profesión siente que estos tres últimos años la crisis socioeconómica ha arropado a todos los estratos y sectores de la sociedad. “La coyuntura del país no discrimina raza, sexo, credo ni profesión", afirmó Pérez mientras dispara su cámara y levanta la pequeña cava llena de helados de elaboración casera conocidos en la región como tetas.

Se considera dentro del periodismo gráfico un verdadero profesional. “Soy como el gallo jugado en siete plazas y que no conoce derrota", humoriza Pérez al referirse a sus años de profesión, vividos en todos los sectores y con todos los actores de la sociedad. La fuente de su pasión son las comunidades waraos y los ríos del Delta del Orinoco.

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Sin embargo, la aguda crisis socioeconómica que atraviesa el país no le ha sido ajena. “No es fácil lidiar con tu profesión y dedicarte a otras funciones para poder sobrevivir en esta situación tan fuerte que nos toca enfrentar todos los días; pero así son las cosas y no son solo los periodistas: son todos los profesionales", aseguró.

“Mi objetivo es vender diez tetas (helados); con eso resuelvo en parte para el diario y, no me da pena ni vergüenza combinar mi trabajo; total, sigue siendo trabajo", señaló Pérez mientras levanta la pequeña cava donde comercializa su producto.

En Tucupita, más profesionales deciden “matar tigritos" ante la pérdida del valor adquisitivo de los salarios. Profesores que venden verduras y productos de campo y profesionales de instituciones que ofrecen sus productos en sus lugares de trabajo ya no son extraños en la ciudad.

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