Cientos de ciudadanos salieron a manifestar este martes, 7 de noviembre, en el centro de Madrid contra Pedro Sánchez y una ley de amnistía que pretende aprobar para beneficiar a los partidos independentistas a cambio de apoyar su investidura como presidente del Gobierno español.
Los participantes cortaron la Gran Vía, una de las principales avenidas de la capital de España, con gritos contra Sánchez y su partido, el socialista PSOE, y pancartas en las que se leían los lemas:»España no paga a traidores, amnistía no», «Pedro Sánchez traidor» o «Sánchez a prisión», entre banderas españolas.
La marcha se produjo tras una concentración cerca de la sede del PSOE en Madrid, ante la que desde el pasado fin de semana se suceden protestas cada día, que la pasada noche derivaron en incidentes con policías antidisturbios en los que hubo tres detenidos.
Las protestas, convocadas por redes sociales, estuvieron apoyadas por grupos ultraderechistas.
Seguid el Ejemplo de España: un llamado a la seriedad en Venezuela
La Policía española había desplegado un importante dispositivo alrededor de la sede socialista, donde los concentrados corearon vivas a España con las consignas: «No nos engañan, Cataluña es España» y «España unida jamás será vencida».
Algunos manifestantes intentaron llegar al Congreso de los Diputados, Cámara baja del Parlamento español, pero el dispositivo policial lo impidió.
Las negociaciones entre socialistas e independentistas catalanes de la formación Junts para la investidura de Pedro Sánchez continúan mientras en España crece el ambiente de crispación política desde algunos sectores y la presión judicial contra una posible amnistía a procesados del independentismo.
España celebró en julio elecciones en las que el más votado fue el conservador Partido Popular, pero no logró los apoyos parlamentarios necesarios para llegar al poder, que ahora intenta alcanzar la segunda fuerza con más votos, el PSOE, con el respaldo de distintas formaciones como Junts.
Pedro Sánchez necesita siete votos en el Congreso para lograr su investidura nuevamente como presidente del Gobierno. La fecha tope para la investidura es el 27 de noviembre y si no se logra habrá repetición electoral, en principio, en enero del año que viene.