La Unión Europea (UE) quiere que la cumbre del G20 que se celebra este fin de semana en Roma sirva para avanzar en el objetivo de vacunar contra el COVID-19 al 70% de la población del planeta para mediados del año próximo y conseguir nuevos objetivos de reducción de CO2 en esta misma década.
«Queremos al 70% de la población mundial vacunada para mediados del año próximo», dijo este jueves en una rueda de prensa la presidenta de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, en referencia a la cumbre del G20.
La Unión Europea, agregó, exporta al menos la mitad de las vacunas que se producen en su territorio y en 2022 cuenta con que se fabriquen 1.500 millones dentro de la UE, de las que «más de la mitad» se enviarán a terceros países.
En el largo plazo, la UE quiere que «se aumenten las capacidades de producción de vacunas en África», especialmente, para vacunas con tecnología ARN como las de Moderna o Pfizer-BionTech contra el coronavirus. Para ello, la UE «está invirtiendo más de 1.000 millones de euros», dijo Von der Leyen.
La presidenta de la CE recordó que la farmacéutica alemana BionTech ha firmado un acuerdo de colaboración con Senegal y trabaja también en esa línea con Ruanda y Sudáfrica. Se consideran, además, acuerdos similares con Ghana, Egipto, Marruecos o Kenia.
África importa actualmente el 99% de las vacunas que utiliza y el objetivo que fija la Comisión Europea es que para 2040 el propio continente pueda producir el 60 % de ellas.
«No estamos ahí, aún», reconoció Von der Leyen, quien señaló que en el G20 también se abordará cómo preparar al mundo mejor para futuras amenazas sanitarias, además de tratar sobre los problemas en las cadenas de suministros en la economía global, cómo implementar rápidamente el acuerdo sobre un impuesto de sociedades global del 15% para las empresas o la crisis.
«La UE hará una propuesta para implementarla (…) antes del final de este año y esperamos que esté globalmente funcionando antes del final de 2023», señaló sobre la tasa.
Cambio climático
La cumbre del G20, que se celebra en vísperas de que el lunes arranque oficialmente la cumbre climática COP26 en Glasgow (Reino Unido), reunirá a los países que liberan el 80% de las emisiones de CO2 del planeta.
Por eso, dijo Von der Leyen, el foro debe servir como senda hacia esa conferencia sobre el calentamiento global, donde se deben revisar los compromisos del Acuerdo de París de 2015 para evitar que las temperaturas a final de siglo suban más de 2 grados respecto a los valores preindustriales, y con el objetivo de limitarlo a 1,5 grados.
En términos climáticos, tanto en el G20 como en la COP26 la UE reclamará que la comunidad internacional haga «compromisos creíbles» no solo para alcanzar la «descarbonización hacia mitad de siglo (…), sino también para recortarlas en esta década».
El bloque comunitario pondrá también énfasis en elevar las trasferencias financieras de los países ricos a los países pobres para adaptación y mitigación contra el cambio climático.
Las economías ricas prometieron en París entregar a los países en desarrollo 100.000 millones de dólares al año para la acción climática entre 2020 y 2025 y en el primer ejercicio sólo se llegó a los 79.600 millones.