El presidente de Perú, Martín Vizcarra, anunció este lunes 30 de septiembre la disolución constitucional del Congreso peruano y llamó a un proceso electoral para elegir a un nuevo Parlamento.
«He decidido disolver constitucionalmente el Congreso para enfrentar los males endémicos que tanto daño le han hecho al país», expresó el mandatario durante un mensaje transmitido en la televisión peruana.
De acuerdo con el artículo 134 de la Constitución de la República de Perú, el presidente está facultado para disolver el Congreso si este ha censurado o negado su confianza a dos Consejos de Ministros.
Vizcarra advirtió el domingo a la cámara, de mayoría fujimorista, que si no se debatía la cuestión de confianza anunciada por su gobierno antes de la elección de los magistrados del Tribunal Supremo de Justicia, se contaría como la segunda negativa; ocurriendo la primera durante la presidencia de Pedro Pablo Kuczynski.
Desde julio, el mandatario ha intentado impulsar una reforma constitucional que incluye la renovación de todos los Poderes Públicos, la cual ha sido rechazada por el Legislativo, quien ha postergado en varias oportunidades su discusión durante las sesiones, razón por la cual fue solicitada la cuestión de confianza.
Tras el mensaje del presidente Vizcarra, cientos de ciudadanos se concentran frente al Congreso para realizar un «cordón humano» en apoyo a la medida e impedir el acceso a los diputados depuestos.
Según la carta magna peruana, los nuevos comicios parlamentarios deberán realizarse en un plazo de cuatro meses, a partir de este lunes.
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