Valera.- Los concejales del municipio Rafael Rangel, en el estado Trujillo, evalúan la propuesta de cambiar el nombre del científico trujillano por el vocablo indígena de Betijoque. Este último es llevado por la parroquia capital.
De acuerdo a los funcionarios, la propuesta fue elevada a la cámara por el alcalde, José Leonardo Chirinos, y ellos decidieron hacer una consulta pública.
Esta se realizó el domingo, 24 de noviembre, y podían participar todos los ciudadanos de las distintas parroquias, principalmente agrupados en los 44 consejos comunales de la localidad. La actividad se realizó en paralelo a las elecciones de estas organizaciones.
No son elecciones
José Manuel Espinoza, concejal de Rafael Rangel, explicó que no se trata de elecciones, sino de una consulta para rectificar el nombre originario. Hay una junta evaluadora que dará los resultados en la tarde de este lunes 25 de noviembre.
«Es una pregunta sencilla: ¿Está usted de acuerdo que le cambien el nombre? No se trata de rechazar, sino de rectificar lo que se hizo el 25 de abril de 1977, cuando se pasó de Distrito Betijoque a Distrito Rafael Rangel, en tres días y sin consultar», declaró el funcionario.
A su juicio no se quiere quitar mérito al investigador trujillano, sino devolver su lugar a la palabra Betijoque, cuyo significado se desconoce, pero «ha estado desde antes de la colonización» aseguró el concejal, quien manifestó que en 1977 las autoridades colocaron Rafael Rangel al municipio por el centenario de su nacimiento.
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No es necesario
Los ciudadanos, por otro lado, se mostraron en desacuerdo ante esta posible modificación, pues hay temas más urgentes, principalmente en materia de servicios públicos.
«No hay ninguna necesidad de cambiar el nombre del municipio Rafael Rangel a Betijoque», expresó Manuel Carrillo. «Él fue un ídolo de nosotros; es como si cambiaran, por ejemplo, el nombre de Isnotú, que tiene mucha historia. No estoy de acuerdo. Hay cosas más importantes, como que nos atiendan con alimentos. La caja llega cuando ellos quieren y al precio que ellos quieren», se quejó el habitante de la parroquia Isnotú.
Consideraron que el nombre del científico, como el de José Gregorio Hernández, le da crédito al estado Trujillo, conocido como «la Tierra de Santos y Sabios».
«Yo no voy a cambiar el nombre de un sabio para poner Betijoque, que siempre ha estado. Deberían trabajar por la comunidad: hay calles oscuras, rotas, no hay gas, no hay luz. El Consejo Municipal tiene que ponerse las pilas«, dijo Benito Márquez.
«Rafael Rangel es el santo por excelencia, aparte de José Gregorio Hernández. Son dos sabios ilustres del estado Trujillo. Deberían estar pendientes del problema del agua, gas y electricidad», manifestó José Guerrero.
La Cámara Municipal se escuda en que esas problemáticas no son competencia de la Alcaldía o de esta instancia, pues son temas que responden a una crisis nacional.
«La gente asocia esto con que no hay luz, que no hay agua, pero eso no es competencia del Consejo Municipal. No porque existan estos problemas se puede dejar de pensar en estas cosas. Es como si beatificaran a José Gregorio y no celebraramos. Todos saben que el agua en Betijoque es por bombeo y la electricidad nos afecta», declaró José Manuel Espinoza.
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