Valera.- El Sindicato Unitario del Magisterio (Suma), del estado Trujillo denunció que los planteles educativos de la región se encuentran abandonados y en deterioro. José Miguel Briceño, presidente de esta organización inmersa dentro de la Coalición Sindical Magisterial, manifestó que especialmente durante la pandemia no hay condiciones para regresar a las aulas.
“No hay condiciones laborales, técnicas, educativas o pedagógicas para regresar a clases. Son 1.086 planteles educativos que están completamente abandonados y deteriorados", dijo Briceño a través de un comunicado difundido a medios de comunicación este viernes, 22 de enero.
Igualmente explicó que algunas instituciones no cuentan con las medidas mínimas para la prevención del COVID-19. “Ningún plantel cumple con la bioseguridad, menos con la desinfección. No tienen antibacteriales, ni servicio de agua potable, tampoco jabón", resaltó el maestro.
La última vez que las autoridades regionales realizaron un abordaje de desinfección de las escuelas fue en septiembre de 2020, antes de comenzar el año escolar. No obstante, para los maestros es primordial una inversión de recursos para aplicar remodelaciones y mejoras.
Instituciones en decadencia
El sindicalista expuso los casos puntuales de dos instituciones antiguas del municipio Valera: La Escuela Bolivariana Eloísa Fonseca y el Liceo Bolivariano Rafael Rangel. Estos planteles tienen más de 100 y 80 años de creados respectivamente.
“Ahí está La Eloísa Fonseca, tiene seis aulas inhabilitadas, está enmontada y con la cerca prácticamente en el piso. El Liceo Rafael Rangel parece una selva. Más de 10 salones inhabilitados y la cancha abandonada«, describió Briceño.
Además, los maestros deben lidiar con otras carencias como la falta de efectivo, transporte público y salarios bajos. Los maestros de la región, expresó Briceño perciben apenas 1,75 dólares mensuales, pese a tener estudios de posgrado. A su juicio, deberían cobrar el equivalente a 300 dólares.