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Mérida.- Durante los últimos 3 días, del 26 al 28 de diciembre, la Comisión Presidencial para la Atención, Prevención y Control del COVID-19 en Venezuela ha reportado 388 casos de esta enfermedad en el estado Mérida. En lo que va de diciembre, la cifra oficial acumula 907 contagios, para un total de 3.817, según las estadísticas del gobierno de Nicolás Maduro.
Sin embargo, el boletín epidemiológico que emite la Gobernación de Mérida reporta un total de 3.929 casos hasta la mañana de este martes 29 de diciembre, de los cuales 2.700 pacientes se han recuperado, 84 han fallecido y 1.145 están «institucionalizados», es decir, recluidos en algún centro asistencial público o privado.
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Área COVID-19 del hospital centinela está a tope
Un médico del Instituto Autónomo Hospital Universitario de Los Andes (Iahula), cuyo nombre pidió reservar, informó a El Pitazo este 29 de diciembre que la totalidad de camas dispuestas en el área de COVID-19 de este hospital centinela, el principal del estado, están ocupadas desde hace varios días.
«Al día de hoy, 36 pacientes están en aislamiento, que es la capacidad total del área COVID-19. Además, 8 están en pasillo, en estabilización, y 3 en sillas debido a que no hay más camas», informó la fuente extraoficial.
Desde el pasado mes de abril, la directora del Iahula, Indira Briceño, tiene prohibido dar informaciones estadísticas sobre el COVID-19. Las autoridades regionales que emiten cifras lo hacen luego de que lo haga la referida comisión presidencial cada noche.
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Llamado de conciencia
En reiteradas ocasiones, médicos del Iahula han alertado sobre el acelerado incremento de contagios de coronavirus en Mérida, así como sobre la sobresaturación de los centros de salud y la escasez de equipos de bioseguridad y de atención clínica para pacientes.
«La situación sanitaria es de extrema gravedad. Las personas no están conscientes de ello. En todo el país se están incrementando los casos de infectados. Mientras la gente piensa en reuniones y celebraciones, en las clínicas y hospitales no se descansa, ingresando pacientes que requieren ser hospitalizados. Es una lucha sin tregua. No se están midiendo las consecuencias que se pueden generar al establecer contacto con otras personas que son posibles portadoras del virus. La responsabilidad es de cada uno de nosotros. Actuar irresponsablemente puede costarnos la vida», escribió el pasado 26 de diciembre por redes sociales Susana Chuecos, médico del Iahula.
También el urólogo José Machado, médico del mismo hospital centinela, advirtió en un artículo de opinión publicado en la prensa regional sobre los errores cometidos en el manejo de la pandemia en el estado, como la prohibición de instalar carpas de Acnur en el área de triaje y la realización de actividades de festejo por parte de entes gubernamentales donde hubo aglomeraciones.
«Otro error cometido desde el poder público, y que vemos con mucha frustración, es el decreto presidencial de liberación del control, que fue convertido en libertinaje festivo y alcohólico, favorecido por alcaldes, como el caso [del titular] del municipio Campo Elías, quien no solo permitió, sino que promovió la realización de amaneceres gaiteros donde el aglomeramiento sin protección se tradujo en 72 casos positivos inmediatos», expresó Machado el pasado 24 de diciembre.
