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San Carlos.- Monseñor Polito Rodríguez Méndez, obispo de la Diócesis de San Carlos, expresó que las plagas que sufrió el pueblo de Egipto no se comparan con lo que se vive en Venezuela. Expresó que el país ha entrado en una etapa de hambruna que afecta a los más pobres y la situación ha empeorado por la aparición del COVID-19.
La información fue ofrecida a través de las redes sociales de la Diócesis de San Carlos, el sábado 25 de julio.
Señaló que en Venezuela hay una economía paralizada con un Producto Interno Bruto (PIB) por debajo de cero. Expresó que la Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi) arrojó que el país se encuentra en una situación económica similar a países africanos, situándose por debajo de Chad o la República Democrática del Congo.
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Destacó que de acuerdo con el estudio de Encovi, 96% de los hogares venezolanos están en situación de pobreza y 79% en pobreza extrema, lo que se traduce en que los ingresos percibidos por los venezolanos son insuficientes para cubrir la canasta alimentaria.
Admitió que la situación en el país puede empeorar en los próximos meses lo que también afectará a la Iglesia. «Los templos llevan cerca de cuatro meses cerrados, sin recursos económicos y hay sacerdotes que ya no tiene qué comer».
El obispo pidió ayuda internacional para enfrentar la crisis que atraviesa el país y afecta a los más pobres que no tienen qué comer y vivir dignamente.
