Washington.- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, considera que no es racional deportar a Venezuela, Cuba y Nicaragua los migrantes que llegan de esos países, y afirmó que trabaja con México para frenar el flujo de estos arribos.
El mandatario aseguró a la prensa en la Casa Blanca este martes, 20 de septiembre, que la situación en la frontera es «totalmente diferente» a la que había en la Administración anterior de Donald Trump (2017-2021), ya que a su juicio llegan menos migrantes de Centroamérica y México
Venezuela es la segunda nacionalidad más alta entre los migrantes que cruzan irregularmente la frontera hacia Estados Unidos, mientras que México se mantiene en el primer lugar dentro de la estadística.
Una de las rutas actualmente utilizadas por los venezolanos para llegar a EE. UU. es la peligrosa selva del Darién, frontera entre Colombia y Panamá. Posteriormente atraviesan los países de Centroamérica hasta llegar a México y cruzar, en la mayoría de los casos, el río Bravo. Según cifras de la Defensoría del Pueblo de Colombia, en los primeros ocho meses del año 68.575 venezolanos han atravesado la jungla.
Ante los rumores de que gobernadores republicanos podrían enviar a migrantes indocumentados al estado de Delaware, donde está la residencia de Biden, el presidente se limitó a responder con tono burlón: «Visiten Delaware, es un estado hermoso».
La inmigración se ha convertido en uno de los grandes temas de la campaña de las elecciones de medio mandato de noviembre a raíz de la decisión de algunos gobernadores republicanos de enviar grupos de indocumentados a estados gobernados por demócratas a modo de protesta por la política migratoria de Biden.
Desde abril, el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, envía regularmente buses con migrantes, la mayoría venezolanos, a Washington, Nueva York y Chicago como respuesta al intento de Biden de rescindir el Título 42, una política sanitaria que permitía deportaciones exprés de migrantes en la frontera.
La semana pasada, el gobernador de Florida, el también republicano Ron DeSantis, se sumó a la estrategia de Abbott con el envío de dos aviones con migrantes a Martha’s Vineyard, exclusiva isla del estado de Massachussetts.
Con información de EFE.