Tres niños venezolanos recibirán 63.000 dólares cada uno por las condiciones que soportaron durante su detención de dos meses en el helipuerto de Chaguaramas, en Trinidad y Tobago. La juez Shurlanne Pierre dictó la orden el 30 de julio, reportaron medios locales el 1 de agosto.
Dijo que los tres niños, de 12, 7 y 2 años de edad, estaban recluidos en un centro en el que no había disposiciones para su bienestar recreativo o educativo. «No había zonas de juego que, como sabemos, son muy importantes para los niños», añadió.
En su evaluación, Pierre también aceptó las pruebas sobre el efecto que las condiciones tenían en los tres.
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En su sentencia, la juez dijo que había factores excepcionales en el caso, ya que ordenó una indemnización por los «actos torticeros cometidos contra niños muy pequeños». Afirmó que existe un conjunto de leyes y convenios internacionales para garantizar que los niños no estén expuestos a tratos vejatorios y estén protegidos.
Ordenó que las sumas se depositen en el juzgado, que a su vez las ingresará en una cuenta remunerada para los niños a cargo del secretario judicial. Cuando cumplan 18 años, podrán solicitar el acceso al dinero. Mientras tanto, la madre puede solicitar al tribunal lo que necesite para cubrir las necesidades inmediatas de los niños.
Trinidad y Tobago criminaliza la migración irregular. Si bien se adhirió a la Convención de Ginebra de 1951 sobre el Estatuto de los Refugiados y su Protocolo de 1967 en noviembre de 2000; el país insular nunca aprobó una legislación nacional para regular los derechos de las personas que buscan protección internacional.
Centro de detención para migrantes en Trinidad y Tobago
Los niños y su madre fueron detenidos en el helipuerto desde el 15 de diciembre de 2020 hasta el 17 de febrero de 2021, después de que un juez del Tribunal Superior ordenara la libertad condicional de la madre. El 12 de enero de 2021 se emitió una orden de expulsión para la madre, pero no para los niños.
Según las autoridades, la mujer y sus tres hijos llegaron de forma irregular en una embarcación junto a otros venezolanos a Trinidad el 17 de noviembre de 2020.
A su arribo a aguas de Trinidad y Tobago, fueron detenidos por la Guardia Costera local, y repatriados. Sin embargo, una semana más tarde intentaron nuevamente entrar al país y también fueron detenidos.
La primera vez fueron detenidos bajo cuarentena del COVID-19 en una institución médica, pero después fueron trasladados a la estación de Policía de Erin y finalmente al helipuerto.
En julio de 2023, el helipuerto fue designado centro de detención de inmigrantes después de que un juez del Tribunal Superior considerara que la instalación, en aquel momento, no era un centro de detención designado según lo dispuesto en la Ley de Inmigración.
El helipuerto fue creado en junio de 2020 por el entonces ministro de Seguridad Nacional, Stuart Young, como centro de detención y cuarentena para alojar a las personas detenidas por la autoridad de inmigración durante la pandemia.
Con información de Trinidad y Tobago Guardian y Agencia EFE
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