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Barquisimeto.- La detonación de una granada M26 que dejó un saldo de dos niños de 8 y 10 años de edad fallecidos y una niña de 6 años herida, el miércoles 9 de septiembre, no ocurrió dentro del vertedero de Pavia, sino en una comunidad aledaña, aclaró la Alcaldía de Iribarren mediante un comunicado para desmentir una publicación del medio oficial Ciudad Bqto, que señalaba que el trágico accidente se registró en los patios de desechos administrados por el Instituto Municipal de Aseo Urbano y Domiciliario de Barquisimeto (Imaubar).
Según vecinos consultados por El Pitazo y reportes de la Policía del estado Lara y del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), la granada detonó en el porche de una vivienda del barrio La Esperanza de la vía Pavia, situado a casi dos kilómetros de distancia del vertedero.
«No sabemos cómo pasó»
Asimismo, la Alcaldía de Iribarren descartó que el artefacto explosivo que los hermanos Montero Camejo encontraron cuando jugaban en el porche de su casa haya salido de los patios de desechos. Los niños activaron la granada al confundirla con una pelota.
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“Tampoco se maneja que los recuperadores o recicladores y mucho menos menores de edad, hayan extraído material alguno para llevárselo a sus viviendas", sostiene el comunicado difundido el 10 de septiembre.
Entre tanto, el presidente de Imaubar, Frank Sánchez, aseguró que en el vertedor de Pavia no se registran sucesos violentos desde hace más de dos años.
Allegados de la familia comentaron a El Pitazo que desconocen cómo pudo llegar la granada hasta la casa de los Montero Camejo.
“Ellos estaban pintando unos dibujos que el papá hizo (en el porche de la casa). El papá entró a seguir pintando un cuarto y salió corriendo cuando escuchó un estruendo pensando que había sido la bombona de gas (…) De verdad no sabemos cómo pasó", relató uno de los vecinos.
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La tarde que ocurrió el accidente, tres de los cuatro hijos de la pareja Montero Camejo estaban en el porche de su casa pintando unos dibujos que había hecho su papá. La familia estaba acomodando la casa para celebrar el cumpleaños 11 del mayor de los dos varones, el próximo 17 de septiembre. Ambos niños murieron en el accidente. La niña lesionada permanece en la terapia intensiva del Hospital Universitario de Pediatría Agustín Zubillaga recuperándose de las lesiones que sufrió en la explosión y su condición es estable, según conocidos.
