Pasaportes y visas, enemigos de peloteros de Pequeñas Ligas para representar a Venezuela

Catorce niños de entre 9 y 10 años le ganaron a seis equipos para titularse como los campeones de Venezuela en la categoría Preinfantil de las Pequeñas Ligas. Se ganaron el derecho de representar al país en la competencia latinoamericana, pero antes deben vencer dos enemigos: pasaportes y visas.

Trece peloteros, un técnico y el delegado de la selección de la Pequeña Liga Cacique Mara de Maracaibo, estado Zulia, están a la espera de que el Saime les entregue sus pasaportes para solicitar las visas al gobierno de Estados Unidos y poder competir entre el 15 y 25 de julio en el Campeonato Latinoamericano Preinfantil, que se celebrará en Mayagüez, Puerto Rico.

Todos hicieron sus pagos, 12 ya están reseñados, un niño y un técnico faltan por la asignación de la cita. El retraso mantiene en tres bolas y dos strike a los niños, que -en videos publicados en las redes sociales- le han suplicado a Gustavo Vizcaino, director del Saime, que les imprima los documentos.

“Siento indignación de ver cómo juegan con el sueño de unos niños de 9 y 10 años. No somos los padres los que vamos a viajar, son los niños que van a cumplir un sueño. Lo más difícil, que era quedar campeones, resultó ser lo más fácil; porque lo difícil ha sido conseguir los documentos", dijo en entrevista telefónica Luis Guillermo Hernández, padre del pelotero Santiago Hernández.

El mánager Luis González lamentó el retraso. Informó que este martes 5 de julio viajan a Caracas para solicitar al Instituto Nacional del Deporte (IND) un oficio en el que se solicite al Saime prioridad en la impresión de los documentos.

“Ya fuimos a Caracas y en el Saime nos dijeron que necesitan una carta del IND para que puedan acelerar el proceso. La selección vamos a ir para tratar de cumplirle el sueño a estos niños", dijo González, quien en 2019 participó como mánager del equipo de Venezuela que compitió en el Mundial de Pequeñas Ligas, en Williamsport, Estados Unidos.

En la raya

Otra división que se mantiene en cuenta máxima es la selección Junior de la Pequeña Liga Coquivacoa de Maracaibo. Los 14 adolescentes de 13 y 14 años quedaron campeones de Venezuela y deben competir entre el 8 y 15 de julio en el Campeonato Latinoamericano de su categoría que se celebrará en Caguas, Puerto Rico.

Dos jóvenes y el mánager del equipo esperan por un pasaporte nuevo, otros seis peloteros por la renovación. Todos los trámites se pagaron. Los representantes estuvieron 15 días en Caracas entre las sedes del Saime y del IND para pedir apoyo y celeridad en el proceso. Regresaron sin documentos.

Los representantes iniciaron el trámite de solicitud de visas sin los dos peloteros y el mánager, y acogiéndose a la medida de EE. UU. de aceptar los pasaportes vencidos.

“Estamos decepcionados, son muchos sentimientos. Seguimos luchando. Tenemos esperanza hasta el final. Queremos que nos escuchen y nos otorguen el permiso. Ya tenemos los pasajes, sólo necesitamos los documentos", dijo una mamá de los niños.

Ponchados 

Los peloteros de la selección Senior de la Pequeña Liga Sierra Maestra de San Francisco, también en Zulia, fueron ponchados por el gobierno de Panamá que no otorgó el visado para que los jóvenes de 15 y 16 años representarán a Venezuela en el campeonato que se celebró entre el 17 y 26 de junio.

“La primera traba que tuvimos fue el Saime. Se tardaron mes y medio en el proceso de los pasaportes. Nosotros no pedimos exoneración. Todos pagamos el proceso, lo que queríamos era que acelerarán. Nos entregaron los documentos ocho días antes del viaje", comentó el mánager Jhonatan Briñez.

Explicó que cuando iniciaron los trámites de la visa, la directiva de la Pequeñas Ligas de Panamá no envió a la embajada la invitación para la delegación venezolana.

“Hicieron formalmente la invitación de todas las delegaciones, menos la de Venezuela. Ellos sabían que éramos los favoritos. Luego cuando se intentó hacer la tramitación, no hubo aprobación de la Secretaría de Estado de Seguridad, al parecer porque los chamos se podían quedar allá en academias de béisbol", lamentó.

Briñez trata de levantar el ánimo a los jóvenes. “Ellos todavía andan frustrados, porque luchan por representar a su país afuera y luego no cumplen su sueño".