Guajira.- “Dentro de poco, en marzo, vamos a arrancar con las clases presenciales parciales con bioseguridad a nivel de todo el Sistema Educativo venezolano", anunció este viernes el presidente de la República, Nicolás Maduro. Ante estas declaraciones, los docentes del municipio Guajira dicen no tener las condiciones para tal retorno.
Entre las deficiencias, destacan la falta de uniformes, pasajes y alimentos en sus hogares debido al alto costo de los productos en el país y el sueldo insuficiente.
“Yo gano 700 mil bolívares y eso me alcanza para medio kilo de harina. Con qué dinero compro zapatos, camisa o pantalón. Cuánto vale un par de zapatos, alrededor de 10 dólares los más baratos. Ni siquiera nos dan los bonos mensuales porque dependemos de la gobernación. No tengo ni para comer, mucho menos para comprar ropa para ir a trabajar", aseguró un docente de la parroquia Sinamaica.
LEE TAMBIÉN
Leopoldo López exige a Fiscalía de Perú investigar asesinato de venezolano Orlando Abreu
Otro maestro de la Guajira, afirma: “Tengo 14 años de servicio, si me niego a retornar, pierdo mi tiempo de trabajo. El jefe municipal sólo sabe dar órdenes, pero es incapaz de pelear por nuestros derechos. Y eso que él depende de la gobernación y sabe que lo que ganamos da vergüenza. No le da pena exigirnos, sabiendo que no tenemos ni para comer".
Sumado a esto, se destaca el estado de la infraestructura de los planteles. Por un lado la falta de los servicios básicos, como el agua potable, indispensable en tiempos de pandemia; sobre todo en un contexto donde los recursos económicos son tan escasos.
Por otra parte, las condiciones de los colegios que fueron habilitados como centros de refugio para los connacionales retornados al país, en su mayoría deteriorados y hasta desvalijados. Y finalmente, los planteles que desde el inicio de la pandemia no se han activado, cuya situación de deterioro es evidente, aunque oficialmente no hay proyectos de reacondicionamiento.