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San Carlos de Zulia.- El exalcalde del municipio zuliano Jesús María Semprum y médico cirujano, Gustavo Fulgencio Brito Escobar, de 67 años, quien padece diabetes tipo 2, logró superar los efectos causados por el COVID-19, luego de un mes de haber recibido tratamiento.
Su familia contó, este miércoles 26 de mayo, que nunca perdieron la esperanza y que clínicamente realizaron los esfuerzos para que el galeno superara el virus que fue declarado pandemia.
Gustavo Brito Rangel, estudiante del sexto año de medicina e hijo del médico cirujano, dijo estar agradecido con Dios y con los vecinos que efectuaron aportes económicos para costear los medicamentos e insumos para su progenitor.
«Mi papá comenzó a recibir atención domiciliaria en Casigua El Cubo, pero al continuar la dificultad respiratoria debimos trasladarlo hasta Santa Bárbara de Zulia, porque en este municipio no existen centros para efectuar placas de Rayos X», detalló Brito Rangel a El Pitazo a través de un contacto telefónico.
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A 20 días de la atención domiciliaria y tras hacerle la radiografía, la neumonólogo Doménica Izzo recomendó su hospitalización en la instancia centinela por un cuadro de neumonía bilateral que agravó aún más su condición.
«Siempre tuvimos mentalidad positiva. Le encomendaron monitoreo 24 horas y tratamientos. Nos dieron vancomicina y otros medicamentos. La atención médica y de enfermería fue excelente», narró uno de los cuatro hijos de Brito, quien, recordó, fue alcalde electo entre 1996 y 2000 del ahora municipio Jesús María Semprún.
En la familia Brito Rangel, con ayuda de vecinos, organizaron un potazo el pasado 17 de mayo para comprar el antiviral faviraparavir cuyo valor oscila entre 60 y 100 dólares. El cirujano, durante el proceso de atención, perdió 15 kilogramos de peso.
Brito estuvo en el área de COVID-19 del centro centinela del Sur del Lago, donde hay tres espacios habilitados para los casos de coronavirus. «Mi recomendación es que hace falta ventilación con acondicionadores de aire; para superar este proceso requiere climatización adecuada y en ocasiones los familiares llevan ventiladores», explicó Brito Rangel.
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Una vez dado de alta en Casigua El Cubo, el pasado 24 de mayo, la familia Brito Rangel ha tenido que lidiar con cortes eléctricos, de entre 6 y 9 horas diarias, en medio de la recuperación del especialista. «Esta situación no ha mejorado en los últimos días», dijo Brito Rangel.
En el estado Zulia, hasta el pasado 24 de mayo se contabilizaron 13 decesos de médicos por causas asociadas al COVID-19. Las muertes se registraron entre el 17 y 23 de mayo, y totalizan 84 los fallecimientos de médicos de distintas especialidades desde el mes de marzo de 2020. Este mes de mayo se perfila como el de mayor letalidad para los profesionales de la medicina.
