Por: Nehomaris Sucre
La compensación recibida por los soldados que cumplen servicio militar en nuestro país equivale a 48$ mensuales, aproximadamente. En contraste, una familia venezolana de cinco personas requiere alrededor de 471 $ para cubrir los gastos de la canasta básica de alimentos, según informe del Centro de Análisis Social de la Federación Venezolana de Maestros correspondiente al mes de abril.
En este sentido, el pago (ración mensual) que recibe un individuo de tropa alistada en la Fanb apenas alcanza para adquirir un 10% de los alimentos básicos necesarios para una familia promedio. De esta forma, prestar servicio militar no es la mejor alternativa para quienes desean aportar económicamente a sus hogares.
La vida militar consta de grandes sacrificios, el tiempo libre y la cercanía de los seres queridos son algunas de las cosas que quedan relegadas en medio de los deberes. También es un trabajo que demanda buenas condiciones físicas para cumplir con faenas rigurosas y por supuesto implica altos niveles de disciplina y fortaleza mental. Tantas exigencias son “compensadas" al soldado venezolano con una ración que no supera los 50$ al mes.
La fuerza armada ofrece a quienes se alistan en el servicio militar la opción de cursar estudios y egresar como oficiales o sargentos, sin embargo, los profesionales de estas categorías actualmente devengan sueldos muy bajos en comparación al de militares de otros países de Latinoamérica. Incluso, personal con hasta 13 años de servicio recibe salarios inferiores a los 200$.
Con tan pocos estímulos para alistarse en la Fanb, se torna más complejo para la institución cumplir con las cuotas de captación planteadas durante los tres procesos de alistamiento que se efectúan cada año en los meses de enero, mayo y septiembre. Esto a su vez puede repercutir en una selección menos rigurosa y que ingresen de esta forma individuos psicológica y físicamente no aptos para las tareas militares.
Con menor cantidad de tropa alistada, pocos incentivos para hacer carrera militar y un número considerable de bajas y deserciones, la Fanb sufre escasez de personal entre los grados y jerarquías medios y bajos. En contraposición cada año ascienden cientos de generales y almirantes, así una institución que por naturaleza debe ser piramidal (con mayor número de miembros en la base y menos integrantes en los grados más altos) va tomando la forma de un embudo.
A este caos organizacional se le suma la politización de la fuerza armada, lo que a su vez es un factor considerado entre quienes no sienten afinidad hacia el chavismo y que por tanto prescinden de formar parte de una institución viciada ideológicamente.
De esta manera, el servicio militar termina siendo una opción escogida sobre todo por jóvenes de estratos sociales muy bajos, que en un país en crisis y con pocas oportunidades ven el alistamiento como una tabla de salvación, aunque los beneficios económicos que les ofrezca no sean suficientes para cubrir más del 10% de los gastos de la canasta básica de alimentos.
NEHOMARIS SUCRE | @Neho_Escribe
Politóloga y militar retirada.
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