Carúpano.- Desde hace casi un año habitantes de Río Caribe, municipio Arismendi en el estado Sucre sobreviven entre la falta de servicios básicos. Destacan que el déficit de alumbrado público, recolección de basura, gas doméstico, agua potable, servicio telefónico y deterioro del hospital Pedro Rafael Figallo han hecho que el pueblo se convierta en un lugar inhóspito para vivir.
Denuncian que los sectores Tocuyito, Carabobo, Las Charas y El Morro son los más afectados por la carencia de agua potable, ocasionando semanalmente cierres de vías por los sectores que claman el servicio. Además la falta de recolección de basura ha originado que los habitantes lancen la basura en el río o en sectores de El Morro, originando el problema de contaminación ambiental y proliferación de zamuros.
Los habitantes exponen que la falta de señal telefónica también se ha agudizado desde hace dos meses, quedando los teléfonos celulares y residenciales sin señal hasta por semanas. Extendiéndose la falta de línea por los constantes apagones y fluctuaciones de la energía eléctrica hasta los puntos de ventas y la única entidad bancaria que queda en el municipio, teniendo que cerrar hasta por tres días, quedando Río Caribe sin banco.
“Aquí también se ha impuesto el cobro en dólares en los establecimientos comerciales y no hay precio justo sino injusto en dólares. Además el Clap no existe, porque en este año solo nos han vendido dos cajas y en el municipio abundan los malos olores por el colapso de aguas servidas", añadió Juan González, residente de la parte alta.
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Entre las carencias que demanda el pueblo está el servicio de gas doméstico, el cual desde hace tres meses el ejecutivo regional y local no realizan una jornada de gas comunal, lo que obliga a los habitantes a comprar el cilindro pequeño en Bs 100.000 cuando el costo es Bs 5.000.
Déficit
En reiteradas oportunidades el enfermero y dirigente social, Jhon Valencia ha denunciado las precarias condiciones en la que funciona el hospital de Río Caribe donde detalla que la comida es solo sardina, no hay ambulancia, medicinas, entre otros.
“Ya no sé cómo buscar soluciones a la situación, desde hace un año no existe oxígeno en el hospital. El quirófano está cerrado hace seis años y la sala de parto no funciona. Este panorama lo saben las autoridades y hasta la fecha no han dado respuesta, de nada ha servido las protestas y denuncias", aclaró.
Valencia informó que en el municipio se producen trancas constantes por fallas en los servicios básicos, a lo que se le suma las carencias que atraviesa el importante centro asistencial que recibe diariamente 120 pacientes. Los nivaldinos esperan que las autoridades les den pronta respuesta a las calamidades que padecen.
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