Maturín.- En el terminal de pasajeros de Maturín los usuarios se quejan del sobreprecio de los pasajes y el déficit de unidades, especialmente hacia la ruta Maracay – Valencia, en el centro del país. Aseguran que solo una línea de autobuses expresos cuenta con unidades propias, pero solo realiza viajes interdiarios; las otras dos solo trabaja con transporte habilitado.
Ana Luisa Rodríguez es una de esas usuarias. Indica que la ausencia de autobuses ha hecho que los dueños de las líneas especulen con el precio de la boletería. “Algunos quieren cobrar setenta mil bolívares y otros sesenta y cinco mil bolívares, montos que son elevadísimos, pero que terminamos pagando por la necesidad de viajar”, mencionó.
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Rodríguez considera que falta más vigilancia de parte de las autoridades del terminal, pues mientras no haya personal fiscalizando a las empresas, los vendedores seguirán jugando con los bolsillos de los usuarios, quienes además deben contar con pago móvil o efectivo para cancelar por el pasaje para salir de la ciudad.
“En las rutas que van hacia los municipios se observa que te cobran el pasaje después de que este ha salido del terminal. Lo hacen así para que uno no se queje y no los multen a ellos”, dijo José Salazar, un pasajero que hacía cola hacia el municipio Caripe, cuyo boleto cuesta 3.500 bolívares, pero algunos choferes piden hasta 7.000.
Sobre este caso, el director del terminal, Alberto Escorihuela, insistió en que el aumento del pasaje está prohibido y que ningún conductor o colector está autorizado a cobrarlo, pues de lo contrario puede ser sancionado administrativamente. En este sentido, mencionó que ya una empresa fue sancionada por vender el pasaje hacia Maracay a un precio por encima de lo permitido.
Escorihuela recordó que al acumular tres sanciones administrativas, el vendedor o dueño de la línea puede ser detenido por usura. “El llamado es a los usuarios para que sigan denunciando, porque esta es la única forma que tenemos de hacer contraloría dentro del terminal”, indicó el funcionario, quien al mismo tiempo hizo referencia a que la única forma de que se cobre más de 55.000 bolívares, que es el costo del boleto hacia el centro del país, es que sea autorizado por la dirección del terminal.
Aclaró que esto se realiza solo para las unidades habilitadas y para ello se debe inspeccionar a la unidad. Explicó que ningún vehículo que cumpla con las condiciones mínima de seguridad puede salir del puerto terrestre. “Es que hasta el confort se le debe garantizar al pasajero, porque tampoco vamos a permitir que viajen en un autobús en el que ni siquiera hay baños”, agregó.
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