Margarita.- Para los habitantes de la ciudad de Porlamar en la isla de Margarita, cada día la calidad de vida se va desmejorando, debido a las constantes fallas en la prestaciones de los servicios públicos. Quienes viven en Ciudad Cartón, de esta jurisdicción, manifiestan que su cotidianidad ha cambiado en los últimos meses producto de la lucha que a diario tienen que enfrentar para poder contar con gas y agua.
Según Isec Natera, habitante de esta localidad, es triste ver como tanto los hombres, mujeres y niños dejaron la tranquilidad de su hogar para tomar casi a diario las calles y protestar con sus bombonas, ya que no cuentan con el despacho o la venta de los cilindros como en años anteriores.
LEE TAMBIÉN
COMIENZA DISCUSIÓN SOBRE CRISIS MIGRATORIA DE VENEZUELA EN WASHINGTON
«Aquí ya no hay tiempo para estudiar, trabajar ni descansar, pues sin luz, ni agua ni gas se puede vivir y por eso nos unimos y cerramos las calles, ya que es la única forma de que las autoridades se padezcan de ver lo que estamos sufriendo", aseguró.
Con respecto al suministro de agua también esta población padece la carencia del servicio. “A veces pasamos hasta dos meses sin agua, y cuando llega no viene con claridad sino sucia, entonces tampoco tenemos garantía de poderla consumir, porque tememos a enfermarnos", dijo Natera.
Por su parte Febrina González, lamenta que a sus 80 años esté pasando trabajo cuando debería descansar. “ Yo no pensaba que durante mi vejez me iba a tocar vivir una crisis como esta y mucho menos ver a mis nietos sufrir por la falta de alimentos, y el alto costo de la vida. Por eso aplaudo de pie, lo que ustedes como jóvenes están realizando en las comunidades para mostrar toda la realidad e informar de manera oportuna", manifestó al referirse a la ONG Juventud Insular, tras culminar una proyección de las noticias más importante en Venezuela y así romper con la censura que actualmente existe en los medios tradicionales.
Igualmente Eucaris Fernández, coincidió en la importancia de la participación ciudadana para exigir el respeto a los Derechos Humanos y a las autoridades nacionales la garantía de una calidad de vida con buenos servicios.
“Considero que estas jornadas de Juventud Insular nos dan herramientas claras de cómo exigir nuestros derechos constitucionales y humanos que cada día están siendo violados bajo el silencio de una sociedad que quizás por desconocimiento y temor no exige lo que les corresponde", indicó.
DÉJANOS TU COMENTARIO