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Caracas.- Desde hace casi una década, crear y mantener actividades económicas en Venezuela se ha convertido en una misión ardua. La inflación, las políticas macroeconómicas implementadas por el Gobierno de Nicolás Maduro y, desde hace un año, la pandemia con la implementación de la cuarentena, son situaciones adversas que los emprendedores en Venezuela han tenido que sortear.
No obstante, han sobrevivido aquellos que tienen la certeza de que siempre es posible seguir adelante, pese a las adversidades. Aquellos que utilizan los miedos y las dificultades para desarrollar el propio potencial y materializar abundancia, como diría el motivador español Enric Corbera.
Carmelo Valleta, en entrevista con El Pitazo, nos explica cómo impuso en Caracas, desde 2003, un novedoso concepto para consumir pizza: el slice (porción o trozo) en combo. «Pídela como quieras», es el eslogan del emprendimiento Carmelo’s Pizza que ha sobrevivido a la pandemia y a los embates económicos de los últimos años.
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Valletta nació en un pueblo de Salerno (Italia), el cual dejó a los 10 años de edad, cuando llegó a Venezuela con otros parientes ya hace 56 años. Forma parte de una familia compuesta por tres hermanos que se dedicaban a la venta de carne al mayor cuando se establecieron en el país.
Este comerciante siempre tuvo interés por trabajar con la comida rápida italiana. Fue después de varias incursiones en distintos negocios de este tipo cuando se decidió por la pizza. Y así nació Carmelo’s Pizza, emprendimiento que mantiene locales en Las Mercedes, Chacao, Altamira, La Urbina; Chacaíto, Plaza Las Américas; La Florida, El Paraíso, en el Centro Comercial Millenium y en Capitolio.
Recordó que en sus inicios había mucho entusiasmo y pocos recursos. «Aún así se logró el objetivo. Durante un poco más de seis meses en el negocio se amasaba a mano la masa para las pizzas. Luego se pudieron adquirir otros equipos de cocina: como la amasadora, la rebanadora, en fin, todo lo que nos hacía falta».
Para este emprendedor, su punto de innovación fue hacer accesible la pizza a personas de diversos estratos sociales, mediante la venta de pizza en porciones, en rebanadas cuyos ingredientes el cliente podía escoger y adquirir en combo, a un precio solidario.
«Cuando se creó Carmelo’s Pizza, la pizza era un plato para pocos. Había que comprar una completa para consumirla. El concepto del ‘slice’ lo implantamos nosotros; acompañado de un refresco. Se ofrecía en un combo. La idea gustó mucho, pues a las personas les encantaba tener la posibilidad de consumir una amplia variedad de pizzas. No nos limitamos a una sola receta. Todos los días se elaboraban 70, 80 o 100 pizzas. De allí salió nuestro eslogan: ‘Pídela como quieras’. No teníamos ni tenemos una pizza predeterminada. La gente escoge los ingredientes que quiere agregar a su pizza, que todavía se ofrece en combo, a un precio solidario», relató Valletta.
La idea de ofrecer la pizza en porciones se le ocurrió a este comerciante durante un viaje que hizo a Estados Unidos. «Mi inspiración para crear este concepto fue a raíz de un viaje que hice a Nueva York. Allí se usaba el concepto del ‘slice’. Había variedad en las vitrinas. Me pareció muy apropiada esa forma de presentar la pizza», relató. Por lo que la trajo a Venezuela y la presentó con total éxito.
«Una opción de comida que resuelve»
Aura Castellanos trabaja cerca de Chacao y comenta que a veces resuelve su almuerzo con un trozo de pizza y un refresco. «Todavía lo puedo adquirir y me satisface mientras llego a mi casa».
Similar parecer tiene María Montoya, quien labora en El Paraíso y también comenta que en ocasiones recurre a Carmelo’s Pizza para resolver su almuerzo. «Me gusta por la variedad y que aún lo puedo comprar».
Antonio Casto, comerciante informal del centro de Caracas, dijo que acude al local de esta franquicia porque es una opción de comida rápida que todavía puede pagar, «cuando no llevo la comida y tengo dinero me doy ese gusto».
Sobre el posible impacto social y económico que ha tenido este emprendimiento, Valleta reconoció que en 10 años lograron abrir 22 puntos de venta y unas 30 pizzerías con el mismo concepto, contando entre franquicias y otras sedes del grupo, lo que pudo traducirse en múltiples puestos de trabajo para muchos jóvenes venezolanos.
Un sueño hecho realidad
Para Valleta, Carmelo’s Pizza representa un sueño hecho realidad. «Yo divido en dos partes la historia de la pizza en Venezuela: antes de Carmelo’s Pizza y después. Lo grandioso de esto es que en más de 10 años creamos empleos, una mano de obra que dependía de nosotros. Han pasado unos mil pizzeros, aproximadamente, por nuestros comercios desde nuestros inicios, los cuales aprendieron y, desde luego, se han dedicado a la pizza en otros lugares. Creo que algo le enseñamos a todos estos muchachos», refirió Valleta.
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Además de la generación de empleo, Carmelo’s Pizza apoya causas deportivas para que los jóvenes que cuentan con estas destrezas y no poseen recursos puedan hacer su futuro en el mundo deportivo. El creador de esta marca de pizzas recordó que cuando comenzaron no se imaginaban que iban a ser tan aceptados por el público caraqueño. Admitió haber superado todas sus expectativas iniciales.
Confesó que estos últimos años han sido difíciles, pero han sobrevivido. «Todavía no guindamos la toalla. Pienso que en todo negocio siempre hay dificultades, pero ninguna imposible de superar. Creo que seguiremos superando las expectativas», acotó.
En plena pandemia, Carmelo’s Pizza presentó a los consumidores un nuevo producto: la pizza prehorneada y congelada. «Está al alcance de todo el mundo por su precio, sin menoscabar la calidad del producto», expresó Valletta.
Para este empresario, la clave del éxito «siempre será mirar hacia delante sin perder tiempo. Superar todos los obstáculos. Verlos como retos. Cuando se está convencido de que algo es bueno para uno y para todos, se superan esos retos», consideró Valleta.
