Caracas.- La oposición al Gobierno de Nicolás Maduro, cuyo sinónimo ya no es de forma unánime la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), participó fragmentada en las elecciones regionales y municipales del 21 de noviembre, lo que ocasionó que cosechara derrotas en estados y municipios donde la alternativa contraria al oficialismo tenía claras posibilidades de sumar una victoria.
Ante la decisión de participar o no en las elecciones del 21 de noviembre, la coalición de partidos vinculados con el presidente de la Comisión Delegada del Parlamento electo en 2015, Juan Guaidó, e integrados en el denominado G4, se decantó por la opción de acudir al proceso electoral en el último momento, ya en agosto. En ese momento, uno de los principales voceros opositores, Henri Ramos Allup, destacó que si la conveniencia nacional se orientaba en la participación, entonces los partidos del G4 no eludirían esa alternativa.
El bloque del G4 apostó entonces por acudir en unidad a las elecciones del 21 de noviembre, con la tarjeta de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). Sin embargo, otros factores políticos de oposición, independientes, que habían decidido participar en el proceso electoral mucho antes de que lo hiciera el bloque vinculado principalmente con Guaidó, no manifestaron su disposición para sumar esfuerzos a favor de la llamada Plataforma Unitaria.
Fuerza Vecinal es una de las organizaciones que está entre los factores de oposición, cuya conformación y participación en las elecciones del 21 de noviembre llamó la atención.
La creación de Fuerza Vecinal, integrado por los alcaldes Gustavo Duque, Darwin González y Elías Sayegh, y por los dirigentes políticos Josy Fernández y Morel David Rodríguez, entre otros, se produjo como la constitución de una tarjeta unitaria de los mandatarios municipales y dirigentes políticos opositores para las elecciones regionales del 2021, esto en caso de que la MUD declinara su participación. Fuerza Vecinal postuló así candidatos para alcaldías, concejos municipales, consejos legislativos y a las gobernaciones de Miranda y de Nueva Esparta.
Otro caso llamativo fue el de la Alianza del Lápiz, organización política constituida en 2013, dirigida por Antonio Ecarri y que, como señala el portal Poderopedia, es la expresión política de La Casa del Lápiz, un programa social de la Fundación Arturo Uslar Pietri.
Ecarri fue el candidato de la Alianza del Lápiz -factor independiente- a la Alcaldía del municipio Libertador, en Caracas, y quedó en segundo lugar por detrás de Carmen Meléndez, candidata oficialista y cuadro del Psuv.
La denominada opción del Lápiz se convirtió así en la primera fuerza opositora en el municipio capitalino, pues Ecarri obtuvo 95.077 votos (15.54%), lo que lo ubicó por delante de la opción que presentó la MUD, Tomás Guanipa, quien obtuvo 69.912 votos (11.43%), de acuerdo con los cómputos del CNE.
Otras organizaciones políticas identificadas como opositoras, como el Movimiento de Integridad Nacional Unidad (Min-Unidad), fundado el 16 de julio de 1977 por Renny Ottolina como un factor de agrupación de alternativas independientes al bipartidismo, y Compromiso País (Compa), constituido también de forma independiente en 2020, figuraron entre las opciones y tarjetas que competieron el 21 de noviembre con la MUD y el Psuv, así como con las alternativas vinculadas con la denominada Alianza Democrática de Venezuela.