Caracas.- El fiscal general Tarek William Saab anunció el 22 de enero órdenes de aprehensión contra la abogada defensora de derechos humanos Tamara Sujú y la periodista especializada en el ámbito militar Sebastiana Barráez. La información generó rechazo entre políticos, organizaciones y periodistas.
Según declaraciones de Saab, Sujú y Barráez son investigadas por los delitos de traición a la patria, homicidio intencional calificado en grado de tentativa en la persona del presidente de la República, homicidio intencional calificado en grado de tentativa en la persona del gobernador del estado Táchira, terrorismo y asociación para delinquir.
Tamara Suju y Sebastiana Barráez a Tarek William: continúa criminalizando y apostando a la mentira
Ambas se pronunciaron públicamente sobre las acusaciones. Sujú considera que desde el Ministerio Público se sigue criminalizando el trabajo de los abogados y defensores de derechos humanos; Barráez aseguró que sentía molestia e indignación porque con esta acusación, el fiscal oficialista patea sus principios y honor, y abusa del poder.
Reacciones a las acusaciones
La líder opositora María Corina Machado calificó de «tramas surrealistas y delirantes» los anuncios hechos por la Fiscalía.
«Maduro es un candidato represor y el país lo tiene retratado y eso se llama cobardía pura y dura, porque sabe que no tiene gente, entonces apela a los fusiles y sentencias», expresó Machado.
Por su parte, Karim Vera, presidenta del partido Primero Justicia en el estado Táchira, expresó en entrevista con la periodista Anggy Polanco, que el ataque contra Sebastiana Barráez forma parte de una estrategia para evitar que los comunicadores venezolanos informen sobre las protestas.
A su vez, el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa (SNTP) y el Colegio Nacional de Periodistas (CNP) rechazaron la persecución en contra de la periodista Sebastiana Barráez y la criminalización del ejercicio profesional.
De igual modo, Casla Institute, que estudia y defiende los derechos humanos en América Latina, expresó su «profunda indignación ante la solicitud de detención de su directora por parte del régimen de Caracas, que busca silenciar voces críticas, como las de la abogada Tamara Sujú».