El Gobierno de Estados Unidos anunció este viernes que aceptará peticiones de asilo de nacionales de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que ya están en México a la espera de cruzar a territorio estadounidense, en un intento por descongestionar la frontera del lado mexicano.
El anuncio es fruto de un acuerdo con el Gobierno mexicano que llega días después de una reunión en Ciudad de México entre una delegación estadounidense y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador; indicó en un comunicado el asesor de seguridad nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan.
Como parte de ese acuerdo, el Ejecutivo mexicano se ha comprometido a crear un «espacio internacional multipropósito» en el sur de México para ofrecer nuevas opciones de asilo y de empleo a las personas más vulnerables que se encuentran en el país, detalló la Casa Blanca.
La Casa Blanca no precisa en qué consistirá ese «espacio internacional multipropósito» y el Gobierno mexicano aún no ha ofrecido detalles al respecto.
A principios de mes, una fuente familiarizada con las conversaciones entre México y EE.UU. dijo a EFE que la Administración de Joe Biden ya había propuesto a López Obrador un nuevo programa migratorio del que se beneficiarían refugiados de Cuba, Nicaragua, Venezuela; y otras nacionalidades que ya se encuentran en territorio mexicano.
Según esa fuente, el objetivo del programa -que acabó siendo anunciado este viernes- tiene como objetivo aliviar la presión migratoria que el Gobierno mexicano ha enfrentado durante varios años.
Para solicitar asilo en Estados Unidos, cualquier persona debe demostrar que enfrenta persecución debido a su raza, religión, nacionalidad, opinión política o pertenencia a un grupo social o étnico específico.
El Gobierno de Biden ha implementado diversas medidas para fomentar la migración legal y evitar que miles de personas crucen a pie la frontera con México en busca de asilo o mejores oportunidades económicas, lo cual ha ejercido una gran presión sobre los recursos de algunas comunidades fronterizas.