Un estudio realizado por científicos de universidades de EE. UU. y el Reino Unido descubrió que el coronavirus SARS-CoV-2 se propaga entre los ciervos de cola blanca y otras especies que viven en estado salvaje en Norteamérica, así lo reportó CNN.
Esta nueva detección del virus en distintas especies de animales, desde diferentes puntos del mundo, generó preocupación entre los especialistas, ya que podría mutar y volver a contagiar a los seres humanos.
Hasta ahora, se sabía que las personas pueden infectar a los animales como gatos y perros, o a los animales de zoológico como gorilas.
¿Cómo llegó el COVID-19 a los ciervos?
Según señala CNN, las teorías son muchas. Para empezar, los ciervos tienen cercanía con las personas, metiendo sus narices mojadas en los bolsillos, manos y rostros de seres humanos, dejándolos expuestos a la infección.
“Si alguien muerde una manzana y la arroja, o incluso si estornudó en un pañuelo de papel y lo dejo caer (se crea el contagio)", comentó la Dra. Suresh Kuchipudi del Laboratorio de Diagnóstico Animal de la Universidad Estatal de Pensilvania al medio.
La científica, que ayudó a dirigir el estudio publicado a inicios de mes, encontró que un tercio de los ciervos a los que se le hicieron pruebas en Iowa, Estados Unidos, entre septiembre de 2020 y enero de 2021 mostró evidencia de infección por COVID-19.
También se descubrió que las aguas residuales son portadoras del virus, por lo que el agua contaminada podría ser una fuente. Tampoco se descarta que las personas escupieran o contaminaran el medio ambiente de otras formas y tras esto, los ciervos comenzaran a contagiarse entre sí.
“Surge una pregunta urgente: sabemos que los ciervos están transmitiendo virus entre ellos de manera efectiva. Entonces, ¿a quién más se lo están transmitiendo?", advirtió Kuchipudi.
También es posible que otra especie haya contraído el virus de las personas e infectara a los ciervos.
Además de estos tiernos animales, los ratones, mapaches, zorrillos y otros animales portaban una carga de otros coronavirus. “La cantidad de coronavirus y la diversidad fue una sorpresa", dijo Hon Ip del Servicio Geológico de Estados Unidos al mismo medio.
La preocupación por el contagio animal
Según destacaron, hay muchos motivos para ver el contagio de animales como algo grave.
Por un lado, se crea lo que se conoce como reservorio. Esto significa que si incluso todos los humanos se vacunaran contra la enfermedad, el virus aún circularía entre los animales y podría volver a infectar a las personas con el tiempo.
Sin embargo, es más probable el riesgo de que el virus pueda mutar y evolucionar. Esto puede suceder por la adaptación constante: a medida que infecta a diferentes especies, el virus se adapta a las especies, siendo más peligroso, o también más indefenso, para los humanos.