Caracas.- Un médico, oriundo del oriente del país, denunció que el día de ayer, 16 de diciembre, los militares, el mayor Moreno y el coronel Prato, les informaron del cierre del hospital de campaña del Poliedro de Caracas y les solicitaron el desalojo de la residencia médica en la que el personal se ha estado quedando. Ante esta repentina decisión, un grupo de seis médicos aseguraron que no tiene a dónde ir porque son de otros estados y se encontraban en Caracas trabajando en este centro para pacientes con COVID-19 desde hace más de 500 días.

«Ahorita la residencia médica la están entregando y prácticamente nos están corriendo de aquí, porque ni siquiera nos están dando chance de hacer entrega, nos están corriendo como si nosotros fuéramos no sé, unos animales. Nosotros venimos de trabajar estos días, recibimos hasta un reconocimiento por la parte militar, y ahora no están corriendo de la residencia médica. Nosotros estamos desesperados porque no sabemos a dónde ir porque nosotros no tenemos familia aquí, y menos para pagar un alquiler», expresó este 17 de diciembre el médico que pidió la reserva de su identidad.

Asimismo, indicó que son seis médicos los que están en esta residencia, pero que hay quienes tienes a sus parejas e hijos con ellos. Recordaron que, en su momento, el gobierno de Nicolás Maduro y el Ministerio de Salud llamaron a los médicos de otros estados para que vinieran a trabajar en el Poliedro, ya que en el lugar iban a contar con una residencia médica.

«Ayer hablamos con un general que fue a la sede del Poliedro y él nos dijo que nos iba a dar la oportunidad de quedarnos en la residencia mientras ellos resolvían dónde ubicarnos a nosotros, pero los militares del Poliedro están con la insistencia de que tenemos que irnos. No tenemos ni un carrito para sacar nuestras cosas e irnos a dormir a una plaza, nosotros estamos desesperados y buscando ayuda», relató en una nota de voz que hizo llegar a El Pitazo.

También comentó que el personal cubano que trabajaba en el centro centinela del Poliedro fue desalojado, unos fueron devueltos a Cuba y otros llevados a Centros de Diagnóstico Integral (CDI). «Esa gente se fue prácticamente llorando porque aquí mucha gente dependía de la residencia y la parte de alimentación (…) Se fueron decepcionados del presidente Maduro y de toda esta gestión que se hizo. De 40, quedan como 10 o 15 cubanos», agregó.