Durante un tiempo, Rebecca Roberts, de 39 años, y Rhys Weaver, de 43, cumplieron diferentes tratamientos para embarazarse y completar su familia, pero después de tanto buscar el destino les prepararía una enorme sorpresa: un embarazo doble en plena gestación.
Al cumplirse cinco semanas de embarazo, durante un chequeo médico de rutina, la ecografía reveló algo extraño, asombroso y difícil de creer: un segundo feto que apenas comenzaba su proceso de desarrollo.
Podría confundirse con un embarazo de gemelos, pero este no era el caso, se trató de una “superfetación", un extraño caso en el que la mujer fecunda otro óvulo estando ya embarazada. No se ha determinado aún como ocurrió, pero una hipótesis sostiene que los tratamientos que siguió para embarazarse podrían tener algo que ver.
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“Normalmente una mujer ovula, y si se consigue el embarazo se previene que haya otra ovulación. En el caso de la superfetación, sucedió una ovulación, sucedió un embarazo, sin embargo, no se pudo prevenir que hubiera otra ovulación y aproximadamente tres semanas después la paciente liberó un segundo óvulo y se volvió a embarazar con ese segundo óvulo", sostiene el Dr. Enrique Soto, especialista en fertilidad, entrevistado por Univisión.
Ambos bebés nacieron por cesárea en septiembre de 2020, y tuvieron que pasar un tiempo separados dentro de unidades de cuidados intensivos neonatales especializadas. La pequeña Rosalie nació con un peso de 1,1 kg y Noah nació con un peso de 2,09 kg.