Caracas.- Ana Daniela Villasmil Gulloso, de 26 años, se encontraba desaparecida desde octubre de 2019, cuando le dijo a su mamá que llevaría a su hijo de Caracas a Valencia para que le trataran una infección. El 15 de febrero el Cicpc halló su cadáver en estado descomposición, en las inmediaciones del Jardín Botánico. Las autoridades y la familia presumen que la mató su pareja.
Villasmil tenía pocos días en Caracas. La joven vivía en el sector San Francisco, de Maracaibo, pero el 17 de octubre tomó la decisión de viajar a la capital para quedarse unos días con su mamá, pues había sido amenazada de muerte por su pareja, identificado con el nombre de Anderson, con quien tenía dos años de relación.
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Neglys Gulloso Sánchez, la madre de Villasmil, cuenta que la última vez que escuchó su voz fue el 18 de octubre de 2019 cuando le dijo que estaba tomando una unidad de transporte para ir a Valencia, estado Carabobo, y que se hospedaría en la casa de su prima, quien reside en el sector Las Aguitas, pues llevaría a su hijo al hospital de esa ciudad para tratarle una infección respiratoria.
La madre de Villasmil, después de que su hija le informó que prefería irse a Valencia, no la volvió a llamar. Para ella esta falta de comunicación no era novedad, pues era «normal» que pasaran hasta tres semanas sin saber una de la otra. Sin embargo, a los 20 días Gulloso Sánchez se preocupó y empezó a buscarla en centros de salud de Caracas y Carabobo. Ante la falta de respuesta de su hija, decidió a inicios de diciembre denunciar su desaparición ante el Cicpc.
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Funcionarios de la policía técnica empezaron a investigar y dieron con la información que Villasmil se había regresado a los pocos días de Valencia a Caracas, en el sector San Agustín, para reconciliarse con su pareja.
La madre de la víctima dice que al encontrar la pista, los efectivos fueron hasta la casa del hombre para conversar con él y vieron que tenía el celular de la dama.
El caso se quedó en veremos hasta el pasado sábado 15 de febrero cuando funcionarios del Cicpc fueron a detener a Anderson porque determinaron que era responsable de la desaparición de Villasmil. Sin embargo, no lograron el cometido: la detención terminó con el asesinato del hombre, quien según aseguran los uniformados, se enfrentó a la comisión.
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Ese mismo día, la policía técnica halló el cadáver de Villasmil, específicamente en el Jardín Botánico. Los funcionarios llevaron el cuerpo a la medicatura forense de Bello Monte y determinaron que la mujer fue asfixiada, pues no tenía marcas de herida de bala o arma blanca. Sin embargo, hasta la mañana de este viernes 21 de febrero la autopsia no había sido entregada a los deudos.
Villasmil era bachiller y solo tenía a su hijo de un año, que también era hijo de Anderson. Como el niño se quedó sin padres, por ahora se encuentra viviendo con su abuela paterna.
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