Barquisimeto.- Poco más de siete horas tenía Bárbara Naybeth Leal Rodríguez de haber retornado de Chile a Barquisimeto para reencontrarse con su familia y sus tres hijas. Llegó con varias maletas alrededor de las 7:00 a.m. del miércoles 1 de noviembre, a su casa, ubicada en la calle 26 con avenida Libertador.
Manuel José Gómez, de 54 años, su expareja y padre de las niñas, llegó al sitio alrededor de las 2:00 p.m. En medio de una discusión, encerró a las dos niñas y una adolescente en un cuarto, quienes empezaron a gritar hasta que los vecinos llamaron a la policía.
Funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) llegaron cuando todavía se escuchaban los gritos y la pelea. Intentaron mediar con el hombre, pero no lo lograron. Incluso lanzaron una granada aturdidora, que tampoco surtió efecto.
OVP denuncia: Gobierno niega entrega de cadáver tras intervención de cárcel de Tocuyito
Gómez —a quien los vecinos conocían como «el Maracucho»— le disparó a Bárbara con una escopeta y luego se quitó la vida con una pistola. Ella tenía 34 años y era la madre de las tres hijas que tenían en común, por quienes discutían la custodia.
En los videos que circularon por las redes sociales, se observa el momento cuando llegaron los funcionarios policiales y luego se escuchan las detonaciones.
Tras el triste desenlace, los policías entraron a sacar a las niñas; taparon sus rostros para que no vieran la escena del crimen.
Familiares, vecinos y amigos estaban consternados; mientras las calles cercanas al sitio permanecieron cerradas por varias horas, antes y después del suceso, por los organismos de seguridad.
TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR
Miles de venezolanos en las zonas más desconectadas del país visitan El Pitazo para conseguir información indispensable en su día a día. Para ellos somos la única fuente de noticias verificadas y sin parcialidades políticas.
Sostener la operación de este medio de comunicación independiente es cada vez más caro y difícil. Por eso te pedimos que nos envíes un aporte para financiar nuestra labor: no cobramos por informar, pero apostamos porque los lectores vean el valor de nuestro trabajo y hagan una contribución económica que es cada vez más necesaria.
HAZ TU APORTE
