Argenis Guerra, Keny Romero y Javier López ocupaban los cargos de director, jefe de régimen y custodio asistencial del Centro de Formación de Hombre Nuevo Simón Bolívar. El Cicpc los detuvo por corrupción al permitir que Juan Carlos Araujo dirigiera una empresa clandestina de eventos y saliera del recinto penitenciario para organizar concierto de Romeo Santos