En claves:
- La afirmación de Trump sobre la exportación de criminales venezolanos a EE.UU. carece de sustento
- La reducción del crimen en Venezuela no se debe a la expulsión de presos hacia Estados Unidos
- Verificaciones independientes desmienten las acusaciones de Trump sobre la migración de delincuentes venezolanos
Este año 2024 es considerado como el súper año electoral en el mundo, más de 100 países tienen procesos de elecciones y al menos 4 mil millones de personas van a sufragar para elegir las autoridades de sus países. Medio mundo votará, incluyendo a Estados Unidos y a Venezuela.
Además del sufragio, una de las cosas que tienen en común los países que van a elecciones es la desinformación, que no mide fronteras, partidos políticos o países desarrollados. A propósito de esto, en Estados Unidos, unas de las grandes potencias mundiales, también elegirá a su máximo representante a ocupar la Casa Blanca.
Y, aunque a nuestro chatbot, La tía de WhatsApp, al que te puedes unir si haces clic aquí, no ha llegado ninguna petición de verificación sobre unas declaraciones del candidato republicano Donald Trump, sobre si el gobierno del presidente Nicolás Maduro había enviado delincuentes a Estados Unidos, nosotros decidimos adelantarnos y verificar estas declaraciones del expresidente estadounidense que nuevamente opta por liderar la Oficina Oval, en Washington D.C.
¿Qué dijo Trump?
El expresidente estadounidense acusó el 31 de mayo de 2024, durante una conferencia de prensa en la torre Trump de Nueva York, que el gobierno venezolano ha vaciado sus cárceles y enviado a los delincuentes y criminales a Estados Unidos, al igual que han hecho otros países como, según sus declaraciones, la República Democrática del Congo.
Trump también habló sobre la reducción de criminalidad en Venezuela en un 72% y añadió que “sus prisiones las han vaciado a Estados Unidos”.
“Caracas, sus ciudades, plagadas de crímenes, hace dos años, hace tres años. Acaban de reportar una caída del 72% en el crimen en el último año porque todos sus criminales, la mayoría de ellos, y el resto están llegando ahora, los que no llegaron. En Venezuela, sus prisiones han sido vaciadas en Estados Unidos. Sus criminales y traficantes de drogas han sido sacados de las ciudades y llevados a Estados Unidos, y eso es cierto con muchos otros países”, añadió el candidato virtual a la presidencia de Estados Unidos.
El reiterativo discurso
La afirmación que venía haciendo Trump sobre los migrantes venezolanos y también de otras nacionalidades, igualmente se dejó ver en el primer debate presidencial estadounidense que ocurrió el 27 de junio de 2024. El candidato republicano acusó a su oponente demócrata, Joe Biden, presidente de la nación y que opta a la reelección, de permitir “a millones de personas venir aquí (Estados Unidos), de prisiones, cárceles e instituciones mentales, a venir a nuestro país y destruir nuestro país”.
Pero estas declaraciones son falsas y no tienen sustento, como encontraron nuestros colegas de Factchequeado, dedicados a combatir la desinformación en español en Estados Unidos, en una verificación señalaron que según datos federales publicados por Politifact, funcionarios de inmigracion arrestaron alrededor de 103.700 «no ciudadanos» con condenas criminales (ya sea en Estados Unidos o en el exterior), entre los años fiscales 2021 y 2024. Eso incluye a las personas detenidas en los puertos de entrada y entre ellos.
Un dato que dista de los “millones” que afirmó Trump.
El artículo señala que los funcionarios no dejaron entrar a todas estas personas. El término “no ciudadanos” incluye a personas que tienen un estatus migratorio legal en los Estados Unidos, pero no son ciudadanos estadounidenses.
“Los datos reflejan la cantidad de personas que conoce el gobierno federal, pero no son exhaustivos. Sin embargo, los expertos en inmigración dijeron que a pesar de las limitaciones de los datos, no hay evidencia que respalde la declaración de Trump”, se lee en la verificación.
¿El gobierno de Maduro exporta criminales?
Esta ha sido una de las narrativas que ha intentado posicionar Trump durante sus más recientes discursos sobre la migración de venezolanos en territorio estadounidense.
El candidato presidencial sostiene que en Venezuela se han vaciado las cárceles para enviar a los delincuentes a Estados Unidos, y aunque las cifras oficiales no son ofrecidas por el gobierno nacional, organizaciones que tienen más de 20 años trabajando el tema carcelario en Venezuela llevan registros de lo que ocurre dentro de la población penal del país, donde la mayoría no se encuentran en centros penitenciarios sino en calabozos policiales hacinados.
En primer lugar, es necesario dejar claro que no hay evidencia que se haya vaciado una cárcel para enviar criminales a Estados Unidos, y la razón de esto radica en que desde hace más de 10 años, organizaciones como Una Ventana a la Libertad (UVL) y el Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP) han denunciado graves cifras de hacinamientos, que si bien se han reducido en algunos años, también se ha incrementado en otros, por lo que el problema sigue siendo extremadamente grave.
El último informe anual del OVP, publicado en 2023, estimaba que en los 52 centros de reclusión que hay en Venezuela, aunque solo 45 estaban operativos en 2022, había un hacinamiento de 64%. La organización tiene registros de que en los centros penitenciarios del país hay 33.558 privados de libertad.
De estos 45 centros de reclusión el OVP en su informe destacó que solo 17 centros penitenciarios albergaban una población carcelaria conforme a sus capacidades.
De hecho, en este informe, como en este, en este y en este, también del OVP, se denuncia que las condiciones de reclusión cada vez empeoran más en el país y que ningún centro penitenciario cuenta con los estándares mínimos de reclusión de acuerdo al marco jurídico internacional y menos con enfoques diferenciado para atender a personas con necesidades particulares, y ni hablar de las mujeres, ya que en el país solo existe una cárcel femenina.
¿Y cómo están los calabozos policiales?
La organización no gubernamental Una Ventana a la Libertad (UVL) reportó que el hacinamiento en los centros de detención preventiva del país, conocidos como calabozos policiales, durante el año 2023 fue de 189,31%, un incremento de 13 puntos porcentuales con respecto a 2022, cuando se registró la cifra de 176,2% de hacinamiento.
La ONG, que defiende los derechos humanos de la población reclusa del país, destacó el jueves 8 de febrero de 2024 que durante el primer semestre del año 2023, se monitorearon 282 calabozos policiales y durante el segundo se analizaron 293 centros de detención.
En el informe de UVL se denunció que en el primer semestre del 2023 la población masculina reclusa en los calabozos policiales era de 20.886 detenidos, aun cuando la capacidad instalada de estos espacios es de 10.842 cupos.
En el segundo semestre de ese año la población masculina se contabilizó en 17.481 detenidos para una capacidad instalada de 9.234 cupos, mientras que la población femenina en los centros de detención durante el primer semestre fue de 1.773 detenidas y en la segunda mitad de año aumentó a 2.028, para una capacidad instalada de 213 cupos.
Aquí puede ver una recopilación de informes de la organización que van desde el año 2016 hasta el 2020.
En Venezuela sí desalojaron cárceles pero los reclusos fueron llevados a otras
En septiembre de 2023 comenzaron una serie de operativos implementados por el gobierno nacional para acabar con las mafias que operaban desde los centros carcelarios en Venezuela, una de las megabandas más letales del país, el Tren de Aragua perdió su más importante centro de operaciones, la cárcel de Tocorón.
Siete centros penitenciarios en el país fueron tomados por los funcionarios del gobierno venezolano, y aunque hubo muchas inconsistencias en las cifras, la cartera de Asuntos Penitenciarios publicó listas de traslados de los más de 8 mil privados de libertad que fueron cambiados de cárceles.
Para ese entonces el ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz, Remigio Ceballos, fue la cabeza de lo que el Gobierno bautizó como “Operación Gran Cacique Guaicaipuro». El militar fue quien dio balances —incompletos— sobre las incursiones, pero aún así ofreció cifras discordantes sobre la población penitenciaria de cada uno de los centros de reclusión intervenidos.
Las declaraciones de Ceballos durante los operativos señalan que en las siete cárceles intervenidas hasta el 14 de noviembre de 2023, estaban privados de libertad 8.841 reclusos.
Los datos suministrados por el alto funcionario revelan que, en la cárcel de La Pica, en el estado Monagas, había 1.496 presos; en Puente Ayala, estado Anzoátegui, 1.511; en Vista Hermosa, estado Bolívar, 1.228; en el Internado Judicial de San Felipe, estado Yaracuy, 503 reclusos; mientras que en Tocorón, estado Aragua, había presos 1.600; en Tocuyito (Carabobo), Ceballos anunció que había más de 2 mil, y en el Internado Judicial de Trujillo se registraron 503 privados de libertad.
Pero estos datos ofrecidos por el vocero gubernamental no concuerdan con los publicados en la página oficial del Ministerio para el Servicio Penitenciario, donde según las listas emitidas por este ente, 8.015 reos de las siete cárceles tomadas fueron reubicados a otros centros penitenciarios del país.
Las listas establecen que 2.104 privados de libertad fueron trasladados desde Tocuyito, 861 desde Puente Ayala; 1.458 desde la cárcel de La Pica; 495 del Internado Judicial de Trujillo; 495 de la cárcel de San Felipe; 1.420 de Tocorón y 1.182 de la cárcel de Vista Hermosa.
Lo de la migración dirigida con fines delictivos no es nuevo
No solo Trump está utilizando esta narrativa para enquistarse en el poder. En 2019, el equipo de Cocuyo Chequea también verificó unas declaraciones realizadas por la, para aquel entonces, Superintendente Nacional de Migraciones de Perú, Frieda Roxana del Águila Tuesta, quien declaró que 43 mil presos serían liberados por el gobierno de Nicolás Maduro cerca de las fronteras de Venezuela para que ingresen a distintos países sudamericanos.
Esta declaración de la funcionaria peruana fue realizada en el programa Aló, Buenas Noches de la periodista Carla Angola. En la edición transmitida originalmente el 29 de octubre de 2019, habló de una “migración dirigida” con fines delictivos.
“Van a venir, porque entendemos que nos han puesto dentro de los 43 mil, dicen, presos que han sido puestos en las fronteras, muchos de ellos van a llegar a nuestros lugares para atacar para generar con eso el rechazo a la migración”, fueron las declaraciones de la funcionaria.
En esa oportunidad, la investigación hecha por el equipo de Cocuyo Chequea determinaba que el movimiento de esa gran cantidad de personas hacia las fronteras implicaría un gran operativo de traslado.
Estos operativos equivaldrían a movilizar 1.343 autobuses de 32 pasajeros o más de 537 unidades de 80 pasajeros.
Además el hecho de liberar a más de 43 mil personas llamaría la atención de las ONG, familiares y los propios reclusos o vecinos de las muy frecuentadas fronteras de Venezuela, lo que haría evidente el despliegue.
Y, una eventual liberación de los mismos, de forma progresiva y durante un largo tiempo, implicaría no sólo la resolución del problema de hacinamiento sino debería implicar a policías municipales y estadales bajo la jurisdicción de autoridades locales controladas por la oposición.
Para ese entonces el equipo de Cocuyo Chequea calificó de inconsistentes las declaraciones de la funcionaria peruana por todo lo que implicaba el desarrollo del operativo que cinco años después podemos afirmar que nunca ocurrió, ya que el problema del hacinamiento en las cárceles y calabozos es igualmente crítico.
¿Y qué hay de los índices de inseguridad?
Para intentar sostener su teoría sobre el envio de criminales a Etsados Unidos, Trump también apeló a la reducción de las cifras de homicidios en Venezuela, y aunque sí ha habido una caída, decir que se redujo 72% es extremadamente exagerado.
Como en la mayoría de los casos estadísticos en Venezuela reina la opacidad, el único dato actualizado sobre reducción de la violencia en el país lo ofreció el 14 de mayo de 2024, el ministro Remigio Ceballos, quien informó que el delito en el país se redujo un 25,1%, en comparación con el año 2023. El ministro de justicia no ofreció mayores detalles para hacer comparaciones en las cifras.
Pero fuentes no oficiales, señalan que en 2023, se registraron al menos 6.973 muertes violentas en el país, según los datos presentados el 28 de diciembre de ese año, por el Observatorio Venezolano de Violencia (OVV).
La organización informó que la tasa de muertes violentas es de 26,8 por cada 100 mil habitantes, lo que representa una disminución en comparación con 2021 y 2022.
Roberto Briceño León, sociólogo y fundador del OVV, señaló que se calculan 581 fallecimientos violentos por mes, 134 por semana y 19 por día. El informe detalla que hubo 1.956 homicidios y 953 muertes por intervención policial.
«Es importante resaltar que dos tercios de las víctimas de homicidio tenían entre 15 y 44 años«, afirmó Briceño.
Además, se documentaron 4.064 muertes que aún están bajo investigación. El OVV recordó que en 2022 se registraron 9.367 muertes violentas en el país, de las cuales 1.240 fueron a manos de la policía, 2.328 fueron calificadas como homicidios y 5.799 estaban en averiguaciones.
«A lo largo de 2023, se ha observado una estabilización en las muertes violentas. En años anteriores, había meses con una mayor incidencia de violencia, pero este año vemos una homogeneización a lo largo de los 12 meses, lo que interpretamos como una estabilización de los eventos en una fase de violencia crónica que se ha asentado en el país», expresó Briceño.
Agregó que las cifras de desaparecidos en Venezuela siguen siendo alarmantes, con 1.443 personas reportadas como desaparecidas durante el año.
Veredicto
Basándonos en nuestra metodología de verificación podemos concluir que las declaraciones de Donald Trump sobre la criminalidad en Venezuela y la supuesta liberación de delincuentes hacia Estados Unidos carecen de fundamento. Los datos del Observatorio Venezolano de Violencia y de las ONG como Una Ventana a la Libertad y el Observatorio Venezolano de Prisiones, muestran que, aunque la violencia en Venezuela ha disminuido, no hay evidencia de que el gobierno de Nicolás Maduro haya vaciado las cárceles para enviar criminales a Estados Unidos. De hecho, el problema del hacinamiento en las prisiones y calabozos del país sigue siendo grave, y los operativos recientes han trasladado reclusos a otros centros penitenciarios dentro del país, no al extranjero.
Además, las afirmaciones de Trump han sido desmentidas por verificaciones independientes como Telemundo, El País y CNN, que indican que no hay pruebas de que se haya llevado a cabo una migración masiva de delincuentes venezolanos hacia Estados Unidos. Los datos de detenciones de inmigración muestran que no se ha permitido la entrada a todas las personas con antecedentes criminales, y la mayoría de los detenidos tienen un estatus migratorio legal en Estados Unidos. Por lo tanto, las narrativas de Trump sobre la criminalidad y la migración están lejos de reflejar la realidad.
Si quieres conocer la veracidad de este u otro tipo de contenidos que atenten contra tu seguridad, puedes consultarle a La Tía de WhatsApp, nuestro chatbot de verificación, quien lo hará llegar a sus sobrinos humanos para chequearlos.